Barcelona decepcionada con Puigdemont: desaparece la mayoría de las esteladas de las fachadas
Las calles de Barcelona han amanecido con un tinte distinto en sus fachadas. La presencia de esteladas, que hasta el día de ayer cubrían la mayoría de los edificios, ha disminuido notoriamente.
Tras la declaración de este martes del presidente de la Generalitat en la que proclamó la independencia para después suspenderla, muchos de los partidarios de la secesión han quedado decepcionados. La decisión del president Puigdemont ha provocado que algunas de las personas que tenían colgada la estelada de su ventana la retirasen.
Lo cierto es que aún hay muchas banderas en las calles de la Ciudad Condal pero no con la misma presencia que durante los días anteriores. El sentimiento entre los ciudadanos está ahora más calmando y muchos son los que comulgan con la decisión de Puigdemont. Sin embargo, los independentistas más radicales no entienden que no se haya proclamado la república independiente de manera más clara.
Lo contrario sucedió el pasado lunes tras la manifestación de aquéllos que apuestan por la unidad de España. La ciudadanía barcelonesa contraria a la independencia no mostró prácticamente la bandera española hasta que la marcha no se produjo.
La capital catalana amaneció con un considerable aumento de banderas de España colgadas de los balcones. La visión homogénea de las fachadas cubiertas de esteladas desapareció en ese momento. Los barceloneses se rebelaron y decidieron que era el momento de mostrar su sentimiento de pertenencia al país. Aún así la presencia de banderas independentistas continuaba y continúa dominando las calles.