Barberá y Rus colocaron en Valencia capital 7.000 LEDs comprados por un millón, el doble de su precio
El Ayuntamiento de Valencia, presidido por Rita Barberá, adjudicó un millón de euros en bombillas LED para la capital del Turia a la empresa Inelcom, en el marco del plan de ahorro energético puesto en marcha por la Diputación de Valencia controlada por Alfonso Rus. Una factura millonaria que a raíz de los precios reales mostrados por OKDIARIO debió costar la mitad. El propio presidente de la Diputación había esperado un año para formalizar el concurso que adjudicaría a Inelcom, entre otros, dando tiempo a que la empresa cumpliera con los requisitos técnicos imprescindibles. Los LEDS de la empresa de Xátiva fueron facturados a 150 euros la unidad pese a que costaban la mitad en el mercado.
Las críticas por parte de la oposición en el Ayuntamiento de Valencia no se hicieron esperar. Compromìs pidió explicaciones a Barberá del porqué de un gasto tan desmesurado: 600.000 euros en una primera adjudicación, cuando estaba claro que los precios de Inelcom eran los más caros del catálogo de seis empresas que ofrecían el cambio a bombillas eficientes en toda la Comunidad Valenciana. Tras la primera adjudicación se produjo una segunda, también por 600.000 euros, para cambiar el alumbrado de los polideportivos de Valencia.
El entonces portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia, Joan Ribó, denunció que en 2013 los servicios de Alumbrado del consistorio desestimaron los modelos que ofertaba Inelcom. Sin embargo, tres meses después el Ayuntamiento, y esto es lo que hizo sospechar a Ribó, emitía un informe favorable a los LEDs de Inelcom. “No querríamos pensar que se han hecho informes con calzador para facilitar contratos multimillonarios a un empresario amigo del PP. Por eso, queremos que Barberá nos explique con qué criterios técnicos y económicos su equipo de gobierno optó por la empresa Inelcom, y por qué los informes técnicos hicieron un giro de 180 grados para pasar de descartar la oferta de esta compañía a aceptarla”, dijo Ribó.
El escándalo que supuso la adjudicación de los contratos a Inelcom y las críticas de la oposición provocaron que Rita Barberá frenara el último contrato de 400.000 euros por una nueva partida de bombillas LEG.
Esto significaba que Inelcom, que contaba entre su equipo comercial con varios ex altos cargos del PP, había sido directamente elegida por Barberá para iluminar su municipio en lugar de sus competidores, al igual que otros más de 170 pueblos de la provincia. Y ello a pesar de la escasa fiabilidad de esta firma, según denunció ayer LED y SPA S.L. su gran rival en el concurso de 30 millones de euros en bombillas LED para iluminar los pueblos valencianos que pilotó Rus.
Críticas de otra empresa adjudicataria
En concreto, LED y SPA S. L. una de las firmas adjudicatarias del concurso y proveedora de otras a través de Asdeled, arremetió ayer contra la gran beneficiaria, Inelcom, con la que dicho cargo mantuvo contactos un año antes de adjudicarse: “La empresa responsable de la mayoría de los problemas y artículos de prensa es, exclusivamente, la que tiene su sede en Xátiva [Inelcom], empresa que se estrenó en el mundo del LED justamente con el concurso de la Diputación y que, a pesar de ello, fue con diferencia la que más facturó a través de la central de compras”.
Inelcom facturó 15 de los 30 millones desembolsados por la diputación de Valencia. Pero la crítica de este competidor contra su rival es mayor: “Las lámparas comercializadas por LED Y SPA, S.L. y sus distribuidores costaban (aproximadamente) la mitad, poseían (y poseen) mejor eficiencia, mejor CRI [rendimiento cromático] y contaban con una garantía de serie de 5 años (2 más que la empresa de Xátiva)”.
Lo cierto es que Asdeled, vinculada a LED y SPA, ofertó a este diario por 94 euros una bombilla similar a la que vendió a la Diputación de Valencia por 150 euros a través de diversos adjudicatarios. Su supuesto mejor precio, aparentemente, no se apreció cuando fue contratada por la entidad pública. Todas las bombillas rondaban los 150 euros por unidad. No obstante, el gran vencedor fue Inelcom, una empresa cuyo dueño se entrevistó un año antes con Rus para venderle la idea de su bombilla eficiente. Y Rus no sacó el concurso hasta que el empresario, el dueño de Inelcom, había puesto a punto el proyecto de la bombilla eficiente.
Sin embargo, las bombillas de Inelcom no sólo eran caras, 150 euros por unidad, sino malas, según su rival LED y SPA. “Ahora sale a flote otra polémica, ya de carácter más técnico: tres municipios de la provincia de Valencia (Sedaví, Silla, y Paiporta) que se acogieron al Plan de Ahorro Energético de la Diputación de Valencia, y que en su momento se decidieron a adquirir las lámparas de la empresa de Xátiva [Inelcom], han conformado una especie de club de damnificados para denunciar que las lámparas, tras poco más de 2 años de su instalación, han perdido hasta el 80% del flujo lumínico inicial”.
El duro ataque de esta empresa eléctronica seguía así: «En los últimos días están saliendo a la luz distintas investigaciones judiciales en las que se señalan diversas irregularidades en los contratos públicos de la provincia de Valencia. Uno de los más sonados es el famoso caso del denominado como “las bombillas de Rus”, en el que se acusa al ex presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, de “amañar un Concurso” para beneficiar a una empresa con la que presuntamente mantiene estrechos vínculos y cuya sede está en Xátiva, consistorio gobernado por el mismo Rus cuando se produjeron los hechos.»
«Desde LED Y SPA, S.L. ya nos pronunciamos en anteriores artículos para señalar que nosotros no éramos (ni somos) la empresa bajo sospecha, citando las fuentes informativas en su momento para así demostrarlo”.
“El paso de estos 3 años”, agrega LED y SPA, “ha despejado claramente la diferencia de calidad entre los productos suministrados por unas empresas y otras en el citado Concurso”.
“Desde nuestra empresa, queremos manifestar nuestra preocupación con todos estos hechos, lamentando profundamente los inconvenientes que están sufriendo los vecinos de los municipios afectados. También nos disgusta profundamente que el mal hacer y el afán de lucro de la empresa en cuestión, esté afectando negativamente la reputación del alumbrado público LED y de las demás empresas que concursamos en la central de compras de la Diputación”, concluye esta firma.