Álvarez de Toledo admite que Feijóo, Alonso y Moreno aún no la han felicitado

El nombramiento de Cayetana Álvarez de Toledo como nueva portavoz del Grupo Popular en el Congreso ha despertado suspicacias internas, según algunas fuentes. Una polémica que la diputada por Cataluña ha alimentado hoy al desvelar que aún no la han felicitado ni el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ni el presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, ni el presidente andaluz, Juanma Moreno.
Tras agradecer todas las felicitaciones que ha recibido, ha quitado hierro al hecho de que haya cargos del PP que no la hayan llamado tras su nombramiento, de la misma manera que tiene amigos que tampoco la han llamado o no han considerado oportuno hacerlo aún. «Me parecen lecturas menores sobre debates menores», ha agregado.
En cualquier caso, Álvarez de Toledo ha recalcado que se siente «profundamente arropada» por el PP y ha pedido no dedicarse a debates internos.
«Yo no me fijo en los que me llaman o me dejan de llamar y no hago ninguna lectura política ni personal sobre las llamadas», ha declarado Álvarez de Toledo en una entrevista en Antena 3.
Álvarez de Toledo ha indicado que tiene «la mejor opinión» sobre esos dirigentes del PP, pero ha confesado que en el caso concreto de Núñez Feijóo se conocen «bastante poco» porque se han visto «tres veces». Además, ha saludado las recientes declaraciones del presidente gallego asegurando que el PP no podía abstenerse ante un PSOE que va a poder gobernar en Navarra con los votos de Bildu.
La nueva portavoz ha indicado que España «vive un momento muy difícil» con el «desafío» al ordenamiento democrático y la convivencia y es a eso a lo que se tienen que «dedicar y no tanto a los asuntos internos».
La portavoz parlamentaria del PP ha señalado que en su nuevo cargo intentará trabajar «con humildad pero con firmeza» por la «rehabilitación del Parlamento y del oficio de diputado después de una progresiva devaluación y casi degradación», al tiempo que apostará por «revertir la regresión» del sistema constitucional de los que están «trabajando por su fragmentación y debilitamiento».
Según ha dicho, van a hacer una «oposición indómita», que «no se dejará domesticar», pero «también racional», basad en argumentos y respetando la inteligencia de los ciudadanos. «No una oposición histérica», ha apostillado.
Además, ha dejado claro que hará una oposición «leal» tanto al votante del PP, con los que han firmado un contrato, como al conjunto de españoles, pero «no leal al fracasado candidato Sánchez, cuya deslealtad ha quedado de manifiesto en muchas ocasiones».
Álvarez de Toledo ha asegurado que tiene «muy buena relación» con la portavoz parlamentaria de C’s, Inés Arrimadas, a la que ha definido como una «excelente parlamentaria y dirigente política». «No pretendo rivalizar con Arrimadas», ha resaltado, para subrayar que tienen que centrarse en «controlar» y «marcar» al Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Ante los que dicen que no tiene alma, ha señalado que el alma «es una cosa difícil de captar y definir» y ha recalcado que a ella lo que no le falta es «pasión política». «Lo que intento es que esa pasión política esté enraizada en argumentos y en razones», ha aseverado.
En este punto, ha afirmado que el sentimentalismo «ha causado un daño enorme» y que en la política española ha habido un «exceso de emociones, bajas pasiones e irracionalidad», así como de «infantilización».