Rajoy quiere que el ministro Alonso sea el candidato del PP en las elecciones vascas de otoño

Mariano Rajoy ya ha decidido quién será el candidato del Partido Popular en las elecciones del País Vasco, previstas para finales de 2016. El ministro de Sanidad en funciones y actual presidente del PP en la comunidad autónoma vasca, Alfonso Alonso, será el cabeza de lista de los populares, según ha sabido OKDIARIO de fuentes conocedoras, en una nueva muestra de confianza por parte del presidente del Gobierno aun político que no deja de acumular nombramientos en los últimos años.

Alonso fue elegido presidente del PP vasco en octubre de 2015 en una maniobra rápida de Génova 13 para solventar la crisis abierta por la dimisión de su predecesora, Arantza Quiroga. Alonso, vitoriano, ha sido siempre persona de consenso entre la dirección nacional y la franquicia autonómica, de la que salió camino de Madrid cuando fue requerido para tomar las riendas del Ministerio de Sanidad.

Quiroga dimitía tras un desencuentro con Génova a cuenta de una ponencia sobre libertad y convivencia en la que la líder popular vasca dio cabida a EH Bildu. Desde Madrid, la inicativa se tomó con rechazo, y fue el propio Alonso quien se mostró más crítico con Quiroga, que se vio forzada a retirarla.

Mariano Rajoy no quiso arriesgar y mandó a dirigir el partido en el País Vasco a una persona que reunía dos condiciones imprescindibles: era de su absoluta confianza y conocía la política vasca como nadie. Así Alonso compatibiliza desde entonces el liderazgo del PP vasco y su cargo como ministro.

Sustituto de Ana Mato en Sanidad

Y es que sólo 10 meses antes de ser elevado a la presidencia del partido en el País Vasco, Alonso había dejado sus responsabilidad es como portavoz parlamentario para tomar el relevo de otra mujer, Ana Mato, como ministro de Sanidad. Precisamente, su labor al frente de este departamento es una de las cosas que mejor valora Mariano Rajoy, según las fuentes consultadas por este periódico.

La pacificación de un sector convulsionado por las mareas blancas movilizadas por los sindicatos de funcionarios y las formaciones de izquierda en protesta por los ajustes presupuestarios de la pasada legislatura ha sido muy valorada en la dirección del partido y en Moncloa, según las citadas fuentes.

Pero no sólo eran las manifestaciones y los recortes lo que mantenía en zozobra el Ministerio de Sanidad. También la propia figura de la titular del ramo desestabilizaba al Gobierno y al propio Mariano Rajoy. Ana Mato dimitió un 26 de noviembre de 2015 después de cinco años señalada por la investigación del ‘caso Gürtel’. Y lo hizo ese día después de que el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz publicara un auto en el que la consideraba “partícipe a título lucrativo” de los delitos supuestamente cometidos por su ex marido y antiguo alcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid), Jesús Sepúlveda. 

El desembarco de Alonso, famoso por su buen talante, su firmeza de discurso y su capacidad de trabajo, calmó las aguas y bajo su mandato se afrontó la crisis de los nuevos tratamientos de Hepatitis C. El político vitoriano aguantó en silencio que se le acusara de «responsabilidad» en las muertes de algunos pacientes que no habían podido acceder a estos nuevos fármacos, mientras negociaba con el laboratorio un precio que permitiera afrontar presupuestariamente el acceso de todos los enfermos a este tipo de compuestos en todo el territorio nacional. Hoy, más del 80% de los pacientes de Hepatitis C –unos 40.000– ya han sido tratados con estos tratamientos de última generación.

Su gestión en esta crisis le valió el reconocimiento de sus compañeros de Gobierno y de partido, del Consejo Interterritorial de Sanidad y de la Organización Médica Colegial.

Alcalde de Vitoria cuando se ilegalizó Batasuna

Ésa es la capacidad de trabajo y acuerdo por la que ahora Mariano Rajoy apuesta por quien fue también alcalde de Vitoria entre los años 1999 y 2007. Dos legislaturas especialmente duras en la lucha contra ETA y sus derivadas políticas, casi todos ellos coincidentes con la etapa de José María Aznar en la Moncloa. En ese periodo se aprobaron reformas legislativas y se firmó el pacto antiterrorista con el PSOE, por el que se logró la ilegalización de Batasuna y la deslegitimación social de los terroristas.

Ahora, el presidente Rajoy y su círculo de confianza creen que Alonso es la persona indicada para que el PP luche por la lehendakaritza e finales de año. Creen que su exposición pública positiva y constante en los últimos años y su figura como hombre dialogante y de consenso puede aglutinar las simpatías necesarias en el electorado.

Y además, precisamente por su talante, Alonso puede tener un encargo más en la mochila camino del Parlamento de Vitoria: tender puentes con el PNV, que tiene muy complicado lograr una mayoría estable para gobernar el País Vasco, y que puede ser un aliado quién sabe si puntual o algo más para Rajoy en Madrid.