La trama del PSOE

Ábalos al juez: «El audio sobre las señoritas me ha hecho mucho daño y no tiene relevancia penal»

El ex ministro cuestiona la autenticidad de las grabaciones de la UCO: "No me reconozco"

Ábalos audios señoritas

El ex ministro de Transportes José Luis Ábalos ha denunciado este lunes en el Tribunal Supremo que entre las grabaciones de Koldo García desveladas por la UCO «hay una que me ha hecho mucho daño en la opinión pública sobre unas señoritas, que no tiene relevancia penal». Esta afirmación se ha registrado durante un interrogatorio en el que el político socialista ha cuestionado sistemáticamente la veracidad y integridad de los audios que le comprometen en el caso Koldo ahora transmutado en caso PSOE.

Tal como consta en la transcripción íntegra de la declaración, a la que ha tenido acceso OKDIARIO, Ábalos ha manifestado su desconcierto ante las grabaciones, declarando que «le cuesta mucho reconocerse en ellos». El ex ministro y ex mano derecha de Pedro Sánchez ha llegado a sugerir posibles manipulaciones de la UCO. «Hay mucho que dicen que es inteligible» en las conversaciones.

«Nunca ha percibido estar siendo grabado», asegura Ábalos al magistrado, quien le recordó que «las grabaciones o las ha hecho usted o el señor Koldo». El juez precisó que los audios están «conservados íntegramente, pero que no se ha transcrito lo que no es relevante para el procedimiento». En efecto la UCO ha incorporado a la causa los audios completos para evitar acusaciones de manipulación.

El ex ministro ha mostrado particular inquietud por la duración de algunas grabaciones: «Hay una que dura 12 horas», a lo que el juez respondió lacónicamente que «dura lo que la persona que pulsa el botón».

«Quejas fuera de lugar»

Durante el interrogatorio, Ábalos ha insistido en que las grabaciones contienen información exculpatoria que no se está considerando: «En lo que he leído del informe hay grabaciones exculpatorias: que no ha recibido nada, que no se ha llevado nada, pero se pone el acento en lo que incrimina».

El magistrado tuvo que reconvenir al investigado cuando este comenzó a quejarse del tratamiento de las pruebas: «Esto es una declaración judicial y estas quejas están fuera de lugar».

Bronca del juez

El magistrado ha tenido que advertir duramente a Ábalos varias veces. En particular cuando este comenzó a rebatir informaciones aparecidas en prensa sobre su caso.

Cuando el Ministerio Fiscal le preguntó sobre la sociedad Levantina y Ruz, el exministro respondió: «No es cierto que es su amigo de su infancia», una noticia que publicó OKDIARIO. A lo que el juez le ha espetado: «No es lo que se le pregunta, que parece que habla para los medios de comunicación». La reprimenda judicial evidenció la tensión del interrogatorio y la estrategia defensiva de Ábalos.

Respecto a conversaciones específicas sobre licitaciones, Ábalos ha negado categóricamente su participación. Cuando el juez le pregunta sobre una conversación del 23 de noviembre de 2023 donde «hablan de dos obras de 35 que consigue medio kilo fácil», el ex ministro responde: «No recuerdo ese contenido. Yo no tenía capacidad de influencia».

«Es absurdo porque no tenía posibilidad de nada», ha insistido Ábalos cuando se le cuestionó sobre su supuesta capacidad de intervenir en adjudicaciones públicas.

El ex ministro también negó recordar una conversación del 9 de abril de 2019 en la que supuestamente pidió a Koldo «que hablase con Santos sobre una licitación». «No lo recuerdo, no conozco el contexto, que no me reconozco», declara.

Registro policial revelador

El 10 de junio se practicó un registro en el domicilio de Ábalos donde fue sorprendido ocultando un dispositivo en el pantalón sin bolsillos de su amiga y estrella del porno Anaís D.. «Tenía algo oculto en el pantalón que era un disco duro», según consta en las actuaciones judiciales.

Ábalos justifica la posesión del dispositivo explicando que era «una copia parcial de toda la información que ya tiene la Guardia Civil» y que contenía documentación «de carácter personal y algo de su actividad parlamentaria».

El ex ministro revela que existía otra memoria incautada en el domicilio de Koldo que no sabe «por qué lo tiene Koldo» y que contiene «información previa a 2021». Ábalos explica que se la había entregado durante «la mudanza, porque sale del Ministerio de un día para otro» con la idea de que «se la devolviese».

Durante su declaración, Ábalos también admitió estar viviendo «una situación muy tensa desde el punto de vista personal» y que tiene «la casa vandalizada», circunstancias que utilizó para justificar su solicitud de aplazamiento.

Por su parte, Koldo García se acogió a su derecho a no declarar, alegando falta de tiempo para estudiar la voluminosa causa, pese a que el juez le ha recordado que disponía de toda la documentación necesaria.

Kas acusaciones populares solicitaban prisión provisional sin fianza para ambos investigados, calificando los indicios como «abrumadores» y «muy sólidos». El Ministerio Fiscal destacó la «gravedad» de los delitos investigados y el «cargo que ocupó el señor Ábalos» pero no ve riesgo de destrucción de pruebas, de fuga o de reiteración delictiva.

La perplejidad mostrada por Ábalos ante las pruebas que le incriminan contrasta con la contundencia de unos audios que pueden resultar determinantes para su futuro judicial. La paradoja de un político preocupado por el daño reputacional de grabaciones en un procedimiento que puede acabar con su libertad revela la magnitud de la crisis que vive.

Lo último en España

Últimas noticias