Carmena aceptó el acto de Puigdemont tras negarse a acogerlo 10 hoteles y foros madrileños
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, celebrará el próximo lunes un acto a favor del referéndum independentista en el Ayuntamiento de Madrid, cedido por su alcaldesa Manuela Carmena. Puigdemont intentó celebrar este evento en al menos 10 hoteles de cinco estrellas y auditorios de la capital y ninguno de ellos quiso prestarle sus salas para una conferencia a favor del independentismo.
Según ha podido saber OKDIARIO, el presidente de la Generalitat fue rechazado en una gran mayoría de los grandes hoteles y foros a los que se acercaron dirigentes del PDeCAT para pedir permiso y celebrar ahí el acto que finalmente realizará en el consistorio con la venia de Podemos y Carmena.
El Ayuntamiento de Madrid acordó alquilar al centro cultural Blanquerna, delegación de la Generalitat en Madrid y feudo independentista en la capital, el espacio de la Caja de la Música en la sede del Ayuntamiento para esta conferencia. «Me parece extraordinario que venga a explicar su proyecto», dijo Carmena el día de San Isidro.
Los hosteleros de Madrid no quieren que sus negocios se vean señalados por razón de permitir la celebración de una conferencia en la que se pedirá la ruptura con España y rechazaron las ofertas de Puigdemont mucho antes que el catalán recurriese al consistorio de la capital. Al presidente de la Generalitat también se le ocurrió pedirle en marzo y por carta al presidente del Senado, Pío García-Escudero, pronunciar su discurso independentista en el Antiguo Salón de Sesiones de la Cámara.
El PP defenderá la Constitución
Desde el PP aseguran que el malestar es justificado y el partido también responderá al acto organizando otro en defensa de la Constitución. Los populares en el Consistorio madrileño ya han avanzado que organizarán este viernes un acto en Cibeles para defender la Carta Magna. El portavoz del PP en el Ayuntamiento, José Luis Martínez-Almeida señaló este jueves el acto tiene como objetivo «llamar la atención a la alcaldesa» quien, a su juicio, da «cobertura institucional a aquéllos que desafían a la Constitución española».
Desde el PP insisten en que no es una cuestión de «cobertura social» sino de «cobertura institucional por parte del Ayuntamiento», por ello piden que Carmena reflexione. Los populares tachan de «provocación» la celebración del acto e insisten que «por más ofrecimientos que nos haga, no acudiremos».
Puigdemont invitó al Gobierno de Mariano Rajoy a ir a «escuchar» su conferencia frente a las «innobles e injustas» críticas que está recibiendo. En la sesión de control al presidente de la Generalitat, Puigdemont reprochó a quienes piensan que «incluso hacer una conferencia» como la que prevé pronunciar en Madrid «puede llegar a ser anticonstitucional».
Puigdemont salió en defensa de Carmena frente a las críticas que está recibiendo por ello: «Lo que está pasando con esta conferencia es innoble e injusto». Además, dijo que la alcaldesa de Madrid «tiene una actitud absolutamente democrática» ya que, pese a estar «en contra de la independencia de Cataluña», no ha dudado en «permitir lo que el Senado español no ha tenido la osadía de permitir, violentando incluso la propia normativa» de la Cámara Alta, lo cual «debería ser digno de elogio».
Carmena «lo está pasando injustamente mal por haber abierto el Ayuntamiento de Madrid para que una persona, que es el representante ordinario del Estado en Cataluña, pueda venir a expresarse en Madrid. Tildar esto de radicalismo está muy alejado de lo que el conjunto de la gente demócrata entiende por radicalismo», dijo el president en su defensa.
Para Puigdemont, es el Gobierno central el que «vive en una realidad paralela» cuando promueve una querella contra la consejera de Gobernación, Meritxell Borràs, «por intentar comprar urnas», en lugar de dedicarse a solucionar el «caos» en el aeropuerto de El Prat, que «es de lo que se tendría que ocupar».
Desde Madrid, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, criticó a la Generalitat por no tener un interlocutor «con capacidad de decisión» para avanzar en el diálogo y advirtió al PDeCAT de su apoyo social cada vez más «menguante» y del «hartazgo» en Cataluña con el proceso independentista.
La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, dijo que el Pacto del Majestic que firmaron CiU y PP en 1996 «sigue vivo para tapar la corrupción» y pidió que el ‘Govern’ ponga las urnas pero para celebrar unas nuevas elecciones autonómicas.