Samsung es destronado en Corea y en el mundo: Hyundai, TSMC y Apple ya superan a la tecnológica
Samsung era la primera empresa de la Bolsa de Corea desde hace 14 años
El año 2023 no fue especialmente positivo para Samsung Electronics. La tecnológica perdió su liderazgo como primera empresa de la Bolsa de Corea del Sur durante 14 años, siendo superada en dicho puesto por el fabricante surcoreano de automóviles Hyundai. En el mismo ejercicio, la tecnológica presidida por Lee Jae-yong también fue destronada en sus dos divisiones: la sección de smartphones de la empresa cayó ante Apple en ventas y la división de microchips cedió ante la taiwanesa TSMC en capacidad tecnológica. Tres clasificaciones en los que la compañía ha estado a la cabeza durante más de una década.
En concreto, Samsung ha sido el primer fabricante de smartphones del mundo desde 2010 hasta 2023, cuando ha sido superada por la americana Apple. Lo mismo ha sucedido con su sección de semiconductores. La compañía coreana ha sido destronada por TSMC, una empresa taiwanesa que «está desarrollando chips de 1 nanómetro», según fuentes del sector.
Además, Hyundai ha logrado destronar en Corea a la tecnológica en 2023 al conseguir «un beneficio de 15.000 millones de wones (10.300 millones de euros) frente a los 6.000 millones de wones (4.300 millones de euros) de Samsung», explican las fuentes.
«Samsung ha ocupado el primer lugar en beneficios operativos entre las empresas de Corea que cotizan en Bolsa desde hace 14 años y ahora lo ocupa Hyundai. Lo sucedido es algo que cambia completamente el rumbo de la compañía», explican. Hyundai aumentó su beneficio operativo el 54% en 2023 en comparación con el año anterior. Con ello, la empresa automotriz se convierte en la más importante de Corea del Sur.
Samsung mantiene el sistema de dos CEOs
La compañía mantendrá el sistema de dos CEOs pese a los malos resultados de 2023. Hace dos años, la multinacional contaba con un sistema de tres divisiones dirigidas por tres personas: smartphones, semiconductores y electrodomésticos.
«La empresa ha mantenido un sistema de tres CEOs desde 2018. Sin embargo, el año pasado, el presidente reemplazó a todos los ejecutivos existentes y cambió a un sistema de dos altos cargos», explican las fuentes. Es decir, Lee Jae-yong, presidente de la sociedad surcoreana, fusionó los departamentos de móviles y electrodomésticos tras sustituir a su padre en el cargo.
La fusión de los dos departamentos resultó en resultados negativos. Samsung facturó 44,2 billones de wones (32.776 millones de euros) en el departamento de smartphones durante el tercer trimestre de 2023, un 7% menos que en el mismo periodo del año anterior. En el mismo periodo, la división de semiconductores facturó 16,44 billones de wones (12.184 millones de euros), lo que supone una reducción del 29% en tasa interanual.
Además, Samsung ha sido destronado en ambas divisiones en 2023 por la competencia. Apple comercializó 234,6 millones de dispositivos en 2023, un incremento del 3,7% con respecto al año anterior, y Samsung distribuyó 226,6 millones de teléfonos inteligentes, una disminución del 13,6% en comparación con el año 2022.
Por su lado, mientras TSMC prepara el revolucionario chip de 1 nanómetro de tamaño, «Samsung se encuentra investigando cómo construir un semiconductor de 1,4 nanómetros», desvelan las fuentes. Es decir, el gigante coreano se encuentra varios pasos por detrás de la empresa taiwanesa en cuanto a nivel tecnológico.
Imputación del presidente
Toda esta situación aparece en medio de la polémica por la imputación del presidente de Samsung Electronics. La fiscalía de Corea del Sur pide 5 años de cárcel para el dirigente y una multa de 500 millones de wones (345.236 euros).
En concreto, Lee Jae-yong ha sido imputado por manipulación bursátil y fraude contable por la fusión de las filiales de la empresa tecnológica Cheil Industries y Samsung C&T Corporation en 2015, valorada en 8.000 millones de dólares (7.346 millones de euros).
Durante esa fusión, que coincidió con la sucesión de Lee a la cabeza de Samsung en sustitución a su padre, la empresa ofreció tres acciones de Samsung C&T por cada una de Cheil. Esto facilitó que Lee aumentara su control en la primera y, a través de esta, sobre el grupo Samsung en su totalidad. Hasta ese momento, Lee poseía el 23,2% de Cheil.
La Justicia coreana defiende que la intención de Lee era inflar el valor de las acciones de Cheil mientras se devaluaban las de Samsung C&T mediante prácticas anticompetitivas, información bursátil falsa, la adquisición masiva de títulos de ambas filiales y la presión sobre el Servicio Nacional de Pensiones de Corea. Este último, uno de los accionistas principales en Samsung C&T, fue presuntamente intimidado para obtener su participación.
En definitiva, las polémicas de Lee y su política de dos divisiones han provocado que Samsung sea superado por Hyundai en Corea, por Apple en su división de teléfonos inteligentes a nivel mundial y por TSMC en su segmento de semiconductores.