Liderazgo en innovación y sostenibilidad marcan la Junta de Accionistas de ACS
El Grupo celebra este viernes su Junta General de Accionistas tras anunciar un contrato de 3.700 millones para transformar la red de metro ligero de Calgary, en Canadá.
El Grupo ACS ha crecido y evolucionado año tras año yendo de la mano de la innovación, la digitalización y la sostenibilidad. Tres conceptos que, además, se han convertido en tres ejes fundamentales de compañías internacionales como la liderada por Florentino Pérez con el fin de conformar un futuro mejor.
Para ello, ACS ha reforzado el área concesional con la adquisición de la SH-288, una de las autopistas más importantes de Texas en EEUU; pero, además, el futuro de la compañía estará marcado por la expansión de nuevos proyectos vanguardistas y de nueva generación. De hecho, en esta línea, el CEO Juan Santamaría ha explicado que trabajan en cuatro nichos de mercado específicos como la movilidad sostenible, la transición energética, la digitalización y la biofarmacia.
Un nuevo camino estratégico, a tenor de sus palabras, a través del cual ACS va a convertir los desafíos del presente en grandes oportunidades de crecimiento y rentabilidad de futuro, demostrando una vez más que la cotizada española es versátil y dinámica al adaptarse a la constante transformación del mundo.
Y es que ACS, gracias a su apuesta permanente por la vanguardia y la innovación aplicada a su sector, está preparada para responder a las nuevas macrotendencias globales que exigen infraestructuras sofisticadas enfocadas a la transición energética, la sostenibilidad y la innovación.
Este dinamismo es precisamente una de las principales fortalezas de ACS, que ha logrado adelantarse a los desafíos de su sector convirtiendo los riesgos en oportunidades. La mejor prueba de ello la encontramos esta misma semana, en la que ACS ha anunciado que su filial Flatiron se encargará de desarrollar el metro ligero de la ciudad de Calgary, en Canadá. Un proyecto que marcará un antes y un después en una ciudad que transformará su sistema de movilidad.
Proyectos y retos complejos
La compañía, además, tiene una privilegiada posición en el sector de las infraestructuras, siendo líder absoluto en todos aquellos mercados internacionales desarrollados en los que está presente. Y es que la experiencia mostrada por ACS en sofisticados y complejos proyectos realizados alrededor del mundo a través de sus filiales como Hochtief, Turner o Cimic es una garantía de crecimiento para la constructora, que se ha convertido en una pieza fundamental en la transformación del sector de las infraestructuras.
En su estrategia corporativa, reflejada en su Plan Director de Sostenibilidad, está también impresa la acción del cuidado y la conservación del planeta. Un compromiso que está presente en todos las áreas del Grupo ACS, así como en sus proyectos. Uno de los casos paradigmáticos de la compañía en materia verde lo podemos encontrar en La Palma.
Tras la erupción volcánica, el Grupo ACS (a través de su filial Dragados) trabajó incansablemente con el fin de tratar de devolver la normalidad a la isla restituyendo la conexión Norte-Sur entre las áreas que quedaron incomunicadas y sepultadas bajo la lava.
Aquel fue, sin duda, un reto que ACS superó gracias a su ‘saber hacer’ y su amplia experiencia en proyectos complejos, ya que tuvo que trabajar en un terreno donde se registraron temperaturas superiores a los 350ºC y que, además, podía ocultar posibles cavidades y tubos lávicos en la traza de la obra.
Por tanto, aquello fue un reto ambiental e innovador sin precedentes mundiales, ya que nunca se había construido una carretera sobre lava de reciente creación y que, además, fuera sostenible. Recordemos que Dragados utilizó materiales provenientes de la propia erupción volcánica para desarrollar nuevos materiales usados en la construcción.
Un proyecto importante que muestra que la sostenibilidad está en el ADN de la compañía y que es un principio irrenunciable que impregna todo su engranaje. Pero, es que, además de la parte más formalista, la que tiene que ver con la consecución de proyectos más pura, ACS posee programas configurados para mitigar el impacto que tiene su actividad sobre la fauna local.
Laboratorios, hospitales y centros de datos, el futuro
También ha señalado Santamaría el peso que para ACS tiene la innovación y la digitalización. El CEO de la compañía tiene la mirada puesta en el futuro y espera que los centros de datos, las plantas de baterías, los laboratorios farmacéuticos y los hospitales, así como los proyectos destinados a favorecer la movilidad sostenible tengan un gran peso en la actividad conjunta del grupo, tanto en su estrategia como en su crecimiento.
Prueba de la importancia de estas nuevas áreas, en la reciente Junta General de Accionistas de Hochtief, filial alemana de ACS, Santamaría calculó que la inversión de los fabricantes automovilísticos en la cadena de suministros de los vehículos eléctricos puede llegar hasta los 330.000 millones de dólares en todo el mundo y, en lo tocante a la infraestructura tecnológica explicó que “las oportunidades en el sector de los data centers se elevan a 110.000 millones de dólares”.
Las últimas adjudicaciones anunciadas por ACS en los últimos meses confirman esta evolución. La cotizada ha anunciado, entre otros, que se va a encargar de desarrollar plantas de baterías para gigantes como LG y Honda (con un valor de 3.400 millones de euros) o Panasonic (de 2.900 millones), centros de datos en Alemania y una planta farmacéutica de 725 millones de dólares en la que se producirán oligonucleótidos que ayudan a tratar el cáncer y otras enfermedades cardiovasculares. La sofisticación de los proyectos de nueva generación aún va más allá, pues también acaba de ganar un contrato para renovar la emblemática base militar de Pearl Harbor, en Hawái, por 2.700 millones de euros.
Los coches eléctricos también presentan otra de las oportunidades de negocio señaladas por el CEO. La necesidad de dejar atrás los motores de combustión está provocando la irrupción de nuevas infraestructuras como las plantas de baterías, herramientas necesarias para sacar adelante la movilidad sostenible, ya que es la autonomía de los coches los que están planteando los grandes retos del sector de la automoción.
En este sector, ACS tiene una posición de privilegio porque a las plantas ya mencionadas para Panasonic, LG y Honda debemos añadir la construcción de una fábrica de reciclaje de baterías en Kentucky para la empresa Ascend Elements. Se trata de una acción valorada en 1.000 millones de dólares y será una instalación pionera al usar el proceso de síntesis desarrollado por el cliente para fabricar materiales de batería sostenibles a partir de baterías recicladas, reduciendo residuos y emisiones de carbono.
Robots, IA y 3D como herramientas de transformación
También la innovación y la digitalización son dos factores imprescindibles para ACS. En este sentido, los drones y los robots, la Inteligencia Artificial y el 3D se han convertido en los nuevos aliados de la empresa. No sólo porque ha logrado transformar su actividad a nivel interno haciéndola cada día más competitiva, sino porque también contribuye al progreso del sector en general. Uno de los ejemplos más significativos es Spot, un robot que se mueve de forma autónoma por las obras para estudiar el terreno y detectar posibles riesgos.
En cuanto a la digitalización, también hay que destacar el consolidado liderazgo de ACS en el ámbito de los centros de datos. Y es que estas instalaciones son cruciales en el entorno digital, por lo que se espera que su desarrollo experimente un auge en los próximos años. Desde un punto de vista técnico, estos proyectos son tremendamente exigentes porque deben estar preparados para asegurar el funcionamiento en caso de corte de suministro o desastre natural.
En este caso, Turner ya ha trabajado para las mayores tecnológicas del mundo, especialmente en EEUU, y ahora ACS pretende expandir sus data centers por Europa gracias a la iniciativa de su filial alemana Hochtief, compañía que ha firmado una alianza para desarrollar estas instalaciones en el país germano.
La salud y la biofarmacia
En el ámbito de la salud y la biofarmacia, dos de los nichos de nueva generación y crecimiento señalados por el CEO de la compañía también se han convertido en cruciales para la diversificación de ACS.
De hecho, los proyectos sanitarios ya ocupan un lugar importante en la cartera de la compañía, especialmente aquellos relacionados con hospitales o instalaciones especializadas en el ámbito oncológico. Desde ACS, se tiene la previsión de que este crecimiento vaya en aumento, sobre todo si tenemos en cuenta los últimos contratos alcanzados. ACS anunció de forma reciente que construiría el Hospital Infantil de Boston y una planta farmacéutica de 725 millones de dólares en Colorado en la que se producirán oligonucleótidos que ayudan a tratar el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.
Las infraestructuras, al igual que casi todos los sectores económicos del mundo, necesitaban en una nueva era para satisfacer las nuevas necesidades de una sociedad sostenible y digital. Y es que dar respuesta a los nuevos retos socioeconómicos de la sociedad por parte de las empresas, como es el caso de ACS, es una manera de contribuir al progreso de las personas.
Con su apuesta por la innovación y la digitalización para contribuir a la sostenibilidad en el sector de la construcción, ACS demuestra que las infraestructuras viven una nueva etapa donde es fundamental un nuevo cambio de piel cada día más verde y respetuosa con el medio ambiente.