Historia con final feliz: una viuda gallega vence a los okupas, y podrá recuperar su casa y 23.000€ de deuda

La inquiokupación es uno de los grandes problemas de España y los desahucios exprés siguen sin ser eficientes. Por suerte, hay alguna noticia que demuestra que los okupas no siempre se salen con la suya.
Pilar, una mujer viuda de La Coruña que llevaba cinco años con la vivienda okupada, ha conseguido que la justicia le dé la razón. No sólo va a recuperar su casa, sino que le tendrán que pagar los 23.000 euros que acumulaba de deudas.
Aunque este caso ha sido positivo, muestra una realidad preocupante: los okupas todavía pueden resistir durante años en una vivienda y causas graves daños económicos y personales a los propietarios.
Una viuda de La Coruña consigue hacer justicia contra los okupas
Pilar vivía con su marido en Pontedeume, por lo que decidió alquilar su vivienda de La Coruña a una mujer con una niña menor de edad. Durante los primeros años todo transcurrió con normalidad.
El precio del alquiler era asequible en comparación con la mayoría de ofertas: 370 euros al mes. No obstante, la okupa demostró no tener escrúpulos y quiso aprovecharse de Pilar en uno de sus peores momentos.
Por desgracia, Pilar enviudó y la okupa vio una oportunidad para dejar de pagar el alquiler. Por increíble que parezca, aludió que el contrato lo tenía con el fallecido y dejó de pagar.
Durante estos cinco años, Pilar ha acumulado una deuda de 23.000 euros mientras se veía obligada a tener que pagar todos los suministros. De hecho, el caso era tan claro que la justicia le dio la razón hace tiempo y dio orden de desahucio.
Sin embargo, la okupa consiguió que se le reconociera como persona vulnerable y logró paralizarlo todo. Pilar estaba convencida de que esto era falso, ya que se le habían ofrecido alternativas y tenía medios para pagar.
Por suerte, al final el juez ha dado la razón a la propietaria y no sólo ha vuelto a activar el desahucio, sino que ha impuesto que tenga que abonar todas las deudas acumuladas.
Las estrategias de los okupas para no tener que irse de la vivienda
Pilar se ha encontrado con una situación que, por desgracia, se repite demasiadas veces en España. Inquilinos desalmados que dejan de pagar el alquiler para convertirse en okupas.
Lo peor de todo es que saben cómo funciona el sistema judicial y, aunque acaban siendo expulsados, logran que el proceso de desahucio se alargue mucho tiempo.
Por ejemplo, al tener un menor de edad a su cargo, pueden declararse como personas vulnerables. Aun así, es importante destacar que un propietario no tendría que ser el escudo social.
De hecho, ante la desesperación de los propietarios, los okupas intentan llegar a pactos. Por ejemplo, a Pilar le ofrecieron un trato: abandonaban la vivienda si les pagaba 10.000 euros. Es decir, un chantaje.
El error de Pilar para acabar con su inquiokupa
Pilar cometió un error que pudo salirle caro durante el proceso para echar a su okupa. Viendo la injusticia que se estaba cometiendo, quiso protegerse.
En esos casos el remedio suele ser peor que la enfermedad. Decidió dejar de pagar los suministros, pero lo único que consiguió es que su cuenta quedase embargada y dejó de cobrar la pensión.
Además, el corte de suministros podría haber sido utilizado por la inquiokupa para denunciarla por coacciones.