El esquí y el turismo urbano impulsan el puente de diciembre
Las buenas noticias para el turismo español no paran de llegar. El sector prevé un puente de diciembre positivo gracias, sobre todo, al prematuro inicio de la temporada de esquí y al turismo urbano, en el que predominan las escapadas a las principales ciudades andaluzas y a Madrid.
La capital de España ocupa la primera posición debido a los viajes de negocios y las escapadas urbanas que se retoman tras el verano, según datos de Trivago. Madrid, Sevilla, Granada y Córdoba son los destinos nacionales favoritos.
Benidorm y Tenerife son los únicos destinos de playa que se hacen hueco entre los más buscados, «lo que contrasta con las preferencias para el pasado puente de noviembre, cuando el verano parecía alargarse y el listado lo dominaban islas canarias», señala el comparador.
En cuanto a los precios, Barcelona, que se sitúa como el octavo destino preferido a nivel urbano, se erige como el destino de España más barato este puente con hoteles desde los 25€, seguido por Valencia, que ofrece precios a partir de los 27€ durante el puente.
Pero hay un factor clave para que el sector registre unos datos positivos este puente: la nieve. «Que en el mes de diciembre te venga nieve garantizada es una noticia importantísima en términos globales para el sector. En los últimos años, lo que era el puente de inicio de la temporada de esquí se había planteado con alternativas. Hacía al menos un lustro que no se producía un arranque de temporada de esquí tan potente», señala Vicente Pizcueta, portavoz de la Federación Empresarial de Asociaciones Territoriales de Agencias de Viajes Españolas (Fetave).
«Los tres grandes pilares del sector en este puente prenavideño son la temporada de esquí, el turismo de interior y el turismo de compras, pero destacando la importancia del factor nieve en prácticamente todo el territorio».
No obstante, Pizcueta considera una oportunidad perdida no haber hecho ajustes en el calendario de festivos: «A priori puede plantearse que al sector turístico le beneficien los puentes, pero también es verdad que con una dispersión de festivos de esta manera, la gente puede escaparse tres días, pero la rentabilidad se merma porque la gente no puede afrontar unas vacaciones de nueve días con su actual poder adquisitivo. Planificar un calendario de vacaciones es una asignatura que España tiene pendiente».