España enfría sus relaciones con Israel: le compra un 30% menos tras reconocer Sánchez Palestina
España importó del país de Oriente Próximo en agosto un total de 34 millones de kilos de mercancías
España enfría sus relaciones comerciales con Israel y le compra un 33% menos en agosto en comparación con el mismo mes del año anterior, después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reconociera Palestina como un Estado. Así lo reflejan los datos publicados este viernes por el Ministerio de Economía y Comercio sobre el comercio exterior.
Así, España importó del país de Oriente Próximo en agosto un total de 34 millones de kilos de mercancías, lejos de los 51,4 millones que adquirió durante el mismo mes del 2023.
Por su parte, el importe que la economía pagó en el octavo mes del año por dichas adquisiciones ascendió a los 60,7 millones de euros, frente a los 80,2 millones de euros que se gastó en agosto del año pasado, un 24,5% menos.
Es decir, mientras la cantidad comprada se ha reducido en un 33%, el precio pagado ha caído menos, algo más de un 24%. Por tanto, no sólo se enfrían las relaciones, sino que España paga menos por cada producto en la actualidad.
En un sólo mes, es decir, de julio a agosto, España ha dejado de comprar a Israel un 28,8%. En el séptimo mes del año, la economía española había adquirido mercancías del país que dirige Benjamin Netanyahu por valor de 85,3 millones de euros.
Así, comienzan a verse los efectos de la política exterior hostil del Gobierno de Sánchez. El Ejecutivo socialista ha inclinado la balanza diplomática hacia Palestina.
Sánchez, Israel y Palestina
En concreto, Pedro Sánchez realizó una declaración institucional a finales de mayo en el que reconoció a Palestina como un Estado, dando así un espaldarazo a Israel y posicionándose en el conflicto que se inició tras los ataques terroristas que sufrió el país hebreo en octubre del año pasado.
El grupo terrorista Hamás aplauidió esta decisión del presidente del Gobierno. El autodenominado Movimiento de Resistencia Islámica, tildó el anuncio del líder socialista de «un paso importante para nuestros derechos».
«Aplaudimos el anuncio de Noruega, Irlanda y España de reconocer el Estado de Palestina y consideramos que es un paso importante en el camino para materializar nuestro derecho sobre nuestra tierra y establecer nuestro Estado palestino independiente, con Jerusalén como capital», añadió el grupo terrorista en una nota dada a conocer en el diario palestino Filastin, un medio cercano a Hamás.
De hecho, la hostilidad hacia la nación hebrea ha sido una actitud continúa por parte del Gobierno. Este mismo jueves, el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, pidió a las empresas españolas que señalen en el etiquetado los productos procedentes de «territorios ocupados por Israel».
Según el Ministerio, poner en la diana a la nación hebrea sirve para que los consumidores tengan información «clara» y «veraz» y puedan tomar decisiones al respecto.
Así, Bustinduy considera que el señalamiento garantiza el «derecho» a recibir una información «veraz» sobre el origen de los productos. Según, esto es especialmente necesario por la situación «crítica» que vive Oriente Próximo.
Para mostrar la importancia que tiene Israel para las empresas españolas y para la economía española, Gil Gidrón, presidente de la Cámara de Comercio e Industria Hispano Israelí, explicó a OKDIARIO que «el negocio bilateral entre España e Israel fue de 3.200 millones de euros en 2022, de las cuales, exportaciones fueron 2.160 millones y las importaciones 1.054 millones, un año récord».
En 2023, «el negocio bilateral fue de casi 2.900 millones de euros», según Gidrón. Sin embargo, estas cifras de comercio con Israel se están viendo reducidas mientras España mejora sus relaciones con Irán y Sánchez reconoce Palestina.
El Club de Exportadores e Inversores Españoles afirma que existe una «crisis diplomática» de España con Israel que puede derivar en crisis comercial, tal y como ha ocurrido con Argelia desde que en 2022 España reconociera la soberanía marroquí sobre el Sahara Occidental.
«Si nuestras empresas venían exportando a Argelia mercancías por valor de 1.916,6 millones de euros en 2020 y 1.887,7 en 2021, las ventas en 2022 se redujeron a 1.017,8 millones y en 2023 no llegaron siquiera a los 350 millones, al ser de 331,8 millones, (frente a unas importaciones de 6.424,8 millones)», advierten los empresarios.