El organizador del Mobile World Congress quiere irse de Barcelona harto de los desprecios de Colau
La huelga del Metro de Barcelona ha colmado la paciencia de los máximos responsables de GSMA, asociación organizadora del Mobile Word Congress. Su director y consejero delegado, John Hoffman, ha comenzado a trabajar en busca de ciudades alternativas a las que llevarse la feria de telefonía móvil más importante a nivel mundial.
Hoffman está muy enfadado con la huelga de Metro, que ha afectado de forma muy negativa al normal desarrollo del congreso que se está celebrando esta semana. De hecho, ni tan siquiera quiso participar en la inauguración del evento. El consejero delegado de la gran asociación mundial de operadores móviles ya ha comenzado a buscar ciudades donde celebrar el encuentro, que considera que Barcelona ha incurrido en incumplimiento de contrato, según han contado a OKDIAIRO fuentes próximas a la organización del Mobile World Congress.
GSMA está barajando varias alternativas a Barcelona. Ya en el pasado, cuando estaba en el aire la renovación del contrato, sonó con fuerza Milán. Otra ciudad bien situada para ser la próxima sede del Congreso es la localidad turca de Estambul. Aquí en España, Cristina Cifuentes ha expresado en una entrevista dada a TVE que le gustaría que el Mobile World Congress se celebrara en un futuro en Madrid. La presidenta autonómica madrileña ha dicho: “lo vamos a intentar dentro de unos años”.
Condiciones del contrato
En GSMA consideran que el Ayuntamiento de Barcelona ha incurrido en un grave incumplimiento de contrato al no garantizar el transporte de los asistentes al recinto ferial en las condiciones acordadas legalmente. Al renovar el contrato, para que se ampliara su vigencia de 2018 a 2023 se incluyó una cláusula donde se establecía de forma muy clara la frecuencia y capacidad mínima de los trenes de Metro que llevan al Congreso, que debían cumplirse ya este año.
En el punto 11 del Apéndice 1 se establece que la Línea 9 y sus infraestructuras relacionadas debían estar plenamente operativas en el momento de celebrarse el congreso de 2016. Además se indica que entre las 7:30 y las 10:30, así como entre las 16:00 y las 19:30, los convoyes de esa línea deben pasar cada tres minutos con una capacidad mínima de 1.000 pasajeros por tren. Se añade: “Durante las otras horas, el Metro L9 ha de funcionar según el horario y las limitaciones de capacidad habituales (que deben ser razonables), incrementando la frecuencia y la capacidad si es necesario en atención a las circunstancias”.
En ese mismo punto del contrato se dice textualmente: “Las partes de la ciudad de acogida reconocen que esta capacidad de transporte es fundamental para el éxito y el crecimiento del Congreso, y que el tiempo es un elemento fundamental”. Al haberse celebrado la huelga, que ha tenido una incidencia muy notable en el transporte con destino a la feria, no se han cumplido las condiciones marcadas por contrato.
La firma de la renovación se produjo siendo ya alcaldesa Ada Colau, pero quien lo tuvo que negociar, ya en funciones, fue su antecesor en el cargo, el convergente Xavier Trías. John Hoffman había mostrado muchas reticencias a mantener el Congreso en la Ciudad Condal, precisamente por el hecho de que Colau fuera a ser la primera edil. Finalmente, y ante las garantías contenidas en el nuevo contrato, decidió firmar.
Siendo candidata a la Alcaldía, Ada Colau, había mostrado su oposición a la continuidad del congreso en Barcelona, una postura que posteriormente matizó. Entrevistada por la emisora radiofónica RAC1 en febrero del año pasado, días antes de la inauguración de la feria, dijo al ser preguntada por este asunto: “La política de grandes acontecimientos en la ciudad puede traer mucho dinero en muy pocos días para unos sectores muy determinados, pero no es un modelo sostenible para la ciudad”.
Ante la insistencia del entrevistador sobre si era partidaria de que el Mobile World Congress se celebrara en Barcelona, Colau respondió: “Depende. Depende de con qué reglas, de cómo se gestionen los recursos, de los gastos que supone. Porque normalmente se habla de grandes acontecimientos o del modelo turístico actual cómo que da grandes beneficios a la ciudad, pero habría que hacer un estudio serio sobre a quien está beneficiando realmente, porque la percepción general de la ciudadanía es que genera grandes y enormes beneficios para muy pocas manos”.
La Generalitat dice que el Congreso se queda
El Gobierno catalán ha respondido a las declaraciones en las que Cristina Cifuentes ofrecía Madrid como futura sede del Mobile World Congress. La consellera de Presidencia de la Generalitat, Neus Munté, ha afirmado este miércoles que el Ejecutivo autonómico aspira a que el Congreso siga teniendo lugar en Barcelona. Ha añadido que la sede del evento al menos hasta el 2023. Cuando ha hecho estas declaraciones todavía no eran públicas las intenciones de Hoffman de buscar otra ciudad por incumplimiento de contrato por parte de Barcelona.