Carrefour apenas consigue vender más en España pese a abrir 95 tiendas en 2018 y superar las 1.000
Los franceses apenas han podido facturar un 1,3% más en nuestro país pese al dinamismo de aperturas y a superar las 1.000 tiendas por primera vez
Carrefour no consigue seducir como antes al consumidor español, al que se ha acercado en 2018 con una apuesta muy ambiciosa de aperturas que ha supuesto 95 tiendas más en el mercado hasta superar holgadamente las 1.000 enseñas. Con los tradicionales hipermercados casi paralizados y cerrando supermercados de forma neta, los franceses han apostado por las tiendas de conveniencia, que han pasado de 654 a 748, y por el modelo ‘cash & carry’, un segmento que no existía en España y del que se han abierto 21 tiendas nuevas.
Sin embargo, el like-for-like o las ventas comparables de Carrefour en España han caído, según dijo el director financiero de la empresa Matthieu Malige, durante la presentación de resultados de la empresa francesa. Esto quiere decir que ha vendido menos por metro cuadrado. Es decir, el ambicioso aumento de superficie disponible (un 8,7% más de puntos de venta) no se ha visto recompensado con un crecimiento equiparable pues su facturación en el país ha llegado a los 8.750 millones, un 1,3% más.
El caso español no es único en Europa occidental, puesto que también ha caído el like-for-like en Italia o Portugal. Sin embargo, es especialmente importante puesto que España supone casi la mitad de todas las ventas de su división europea (sin Francia) y es el tercer país por facturación de la multinacional, tras Brasil (11.919 millones de euros) y la propia Francia (35.615 millones). En su país de origen, donde es líder del mercado, Carrefour vende ligeramente algo más de lo que Mercadona, el líder de mercado español, vende aquí).
El objetivo de ahorro de costes para 2020 se ha establecido en 2.800 millones de euros, que vendrían sobre todo de costes laborales y de espacios
Hace ahora dos años, el anterior CEO de Carrefour Georges Plassat anunció el cambio más relevante de la multinacional cotizada en sus 60 años de vida, un cambio que suponía para la empresa reconocer la preeminencia de Amazon en la ventas de no alimentario y concentrarse en este segmento y en tiendas más pequeñas dejando de lado su histórica labor inmobiliaria construyendo hipermercados. Plassat ya no tenía fuerza para llevar a cabo la revolución que Carrefour necesitaba y que ha quedado en manos de Alexandre Bompard, el actual CEO que ha venido reconociendo fallos dolorosos en la empresa, como que «hace un año no estábamos en la carrera correcta por el e-commerce, pero ha cambiado gracias a nuestro acuerdo con Google», que data del pasado verano.
«No podemos superar a Amazon»
Bompard, que viene del segmento de non-food tras haber sido máximo responsable de FNAC, respondió con mucha nitidez a los inversores que preguntaban a la compañía en la conference call con inversores: «No creemos que podamos ser líderes en non-food frente a Amazon, si miramos a otras empresas ellos vemos que lo hacen muy bien». De este modo, la estrategia ya es desde hace dos años concentrarse en ser líderes en alimentación, un segmento donde el e-commerce aún no hace mucho daño pues la frescura de los productos se considera prioritaria.
Bompard ha reconocido que no están en condiciones de ser líderes del mercado en algunos segmentos de e-commerce donde Amazon está presente
Por el contrario, la compañía ha entrado en un proceso de ahorro de costes y de reducción de superficie disponible para hacer frente a sus menores ventas por metro cuadrado en algunos de sus principales mercados: 2.500 millones de euros de rebaja de costes es el objetivo para 2022, con una estrategia que afectará entre otros a los espacios comerciales.
Entre estos recortes estará el de 400.000 metros cuadrados de superficie comercial, un ‘tajo’ notable al tamaño de sus grandes tiendas donde se está buscando reconvertir el espacio para otros usos más rentables que la venta de electrónica, que ha sido completamente canibalizada por Amazon y el e-commerce.