Carl Icahn, el millonario que dejó la fiesta de Trump para invertir 1.000 millones de dólares en Bolsa
El multimillonario Carl Icahn, que ha declarado estar feliz con la conquista de Donald Trump, dejó la celebración republicana en mitad de la noche electoral para ir a mover 1.000 millones de dólares en acciones en Wall Street. Los índices de futuros caían más de un 4% y las bolsas asiáticas se dejaron casi un 6%, “el mundo entró en pánico sin ninguna razón”, decía al día siguiente el empresario norteamericano.
Mientras Trump celebraba el inesperado triunfo de la candidatura republicana, Icahn salía de la fiesta hacia su casa para realizar operaciones bursátiles. El empresario invirtió 1.000 millones de dólares en acciones del S&P 500, “habría invertido mucho más, el mundo se estaba volviendo loco, entraron en pánico sin ninguna razón”, decía Icahn a Bloomberg TV. Ha explicado que aprovechó el momento para sumergirse en el mercado porque “no creo que una presidencia de Trump sea negativa para Wall Street”.
A medida que Trump se acercaba a la Casa Blanca, los números verdes se alejaban de los mercados. Los futuros del S&P 500 cayeron hasta un 5% durante la noche, unas cifras que frenaron todo tipo de operaciones por el miedo al “Efecto Trump”. Al día siguiente, los analistas esperaban caídas salvajes en los mercados, aunque finalmente la calma llegó y los retrocesos no alcanzaron los dos dígitos.
Icahn ha declarado que la Reserva Federal “no puede sostener la economía norteamericana por sí sola, la política de tipos bajos solo construye una burbuja”. Aun así ha declarado ser partidario de la regulación de Wall Street y no aboga por la abolición de la llamada Ley Dodd-Frank firmada por Barack Obama en 2010. “Las empresas necesitan tener la seguridad de que el Gobierno está de su lado con el fin de aumentar la inversión y la productividad”, decía el magnate en una entrevista.
El nombre de Icahn suena en las quinielas para formar parte del nuevo equipo de Gobierno, podría ser el nuevo Secretario del Tesoro. Una posibilidad, sin embargo, que no parece que se vaya a materializar. Icahn ya ha confirmado que “no se ve adecuado para el puesto, no creo que encaje en Washington, no pertenezco a la clase política y nunca he trabajo para nadie”.