Los agricultores españoles se asocian con los franceses para bloquear la frontera el próximo lunes
Los agricultores españoles se han asociado con los franceses para cortar la frontera entre ambos países como método de protesta ante las elecciones europeas de junio. Las acciones se llevarán a cabo el próximo lunes y han sido convocadas por Revolta Pagesa y la Unión de Asociaciones del Sector Primario Independientes (Unaspi). Ambas organizaciones prevén realizar los cortes en ocho puntos diferentes el 3 de junio.
Varias asociaciones españolas y francesas han llamado al conjunto de la sociedad a protestar por las condiciones del sector agrícola y exigir medidas a las autoridades nacionales y europeas.
Así, los agricultores planean interrumpir el tráfico en la frontera con Francia desde las 10 horas del lunes hasta la misma hora del día siguiente en Irún (Navarra), Canfranc, Sallent de Gállego (Huesca), Bossòst, La Seu d’Urgell (Lleida), Puigcerdà, Coll d’Ares y La Jonquera (Girona), según un comunicado de este miércoles.
Los agricultores cortan la frontera
Las manifestaciones de agricultores franceses ya ha provocado otros cortes en sentido norte de la frontera con España por La Jonquera. El sector agrario del país vecino llegó a atacar a camioneros españoles, desvalijando sus productos.
Como en otras numerosas ocasiones, los agricultores franceses se quejan de que los acuerdos con la Unión Europea les obligan a producir menos y a comprar productos europeos que ellos mismos pueden producir. «Lo que nos cabrea es que tengamos que importar los alimentos que tenemos aquí. Nosotros producimos con unas condiciones excepcionales», explicó Syklvie Meynier, responsable del sindicato FNSEA, en unas declaraciones televisivas.
Ahora, las organizaciones agrícolas han defendido que «será un día histórico», en el que reclamarán más control para los productos importados, dar prioridad a los productos locales y una reducción fiscal en el uso de energías para la producción de alimentos.
Reivindicaciones de los agricultores
Entre las reivindicaciones del sector agrario destacan la política hidráulica con infraestructuras «que garantice el agua con carácter de urgencia»; la simplificación real de la PAC con la eliminación del cuaderno digital; la eliminación de eco-esquemas por modificación e incremento del presupuesto y la subida del IVA compensatorio de los productos agrarios al 21%.
También reclaman ayudas directas para afrontar la sequía que realmente estén en consonancia con los costes de producción actuales; cláusulas espejo -«los productos extracomunitarios solo deben entrar con los mismos requisitos que nos exigen a nosotros»-; y el no a la ley de la cadena.
Asimismo, han insistido en la derogación de ley animalista y de bienestar animal; en el estudio profundo del problema laboral del mundo rural tanto en lo referido a mano de obra como en las cargas sociales; en medidas reales de apoyo al relevo generacional; y en la revisión y modificación de la ley de restauración de la naturaleza y agenda 20-30.