Viktor Gyokeres, el sueño secreto del Atlético de Madrid
El fichaje del delantero sueco es un objetivo que el club lleva con la máxima discreción
Lo persiguen los grandes europeos, con el Man'U de su ex entrenador a la cabeza
La inversión por Julián evitó este verano apostar al máximo por Gyokeres
Viktor Gyokeres es el sueño secreto del Atlético de Madrid. Ya intentó ficharlo el pasado verano, pero la enorme inversión realizada por Julián Álvarez impidió que se pudiera poner toda la carne en el asador. Se va a volver a la carga cuando acabe la temporada, pero en el club son conscientes de que el atacante del Sporting de Lisboa está en la agenda de todos los grandes de Europa, comenzando por el Manchester United de su ex entrenador Rúben Amorim.
Los números de Gyokeres en esta temporada son impresionantes: lleva 16 goles en 11 partidos de la Liga portuguesa, 5 en 4 partidos de Champions, 2 en la Allianz Cup, 1 en la Copa de Portugal y otro en la Supercopa. En total 23 dianas en 18 partidos, además de sumar cuatro asistencias. Marca un gol cada 66 minutos y ahí falta su bagaje con la selección sueca, con la que suma 10 dianas en 24 internacionalidades, y con la que jugará en este parón ante Eslovaquia y Azerbayán.
La gran pregunta aquí es: ¿puede el Atlético de Madrid meterse en la puja por un futbolista que ya está por encima de 100 millones de euros? La clave es el reciente acuerdo firmado con Riyadh Air, que tal y como anunció OKDIARIO le puede reportar al club unos ingresos de 657 millones hasta 2033. Suficiente capital como para ir a por un par de jugadores de primer nivel: Álex Baena y Viktor Gyokeres son los grandes objetivos de la dirección deportiva que capitanea Carlos Bucero. Juntarlos con Julián Álvarez es su gran sueño, pero estamos hablando de operaciones de altísimo coste económico.
El Atlético ya le ha dicho al representante de Gykores que está en disposición de igualar otras ofertas. La negociación, que arrancó este pasado verano, aunque no pudiera fructificar, se está llevando a cabo con la más absoluta discreción, conscientes de que van a tener que pelear con verdaderos trasatlánticos. El gran peligro lo supone el Manchester United por la presencia de Rúben Amorim, un entrenador al que seguía también muy de cerca el club rojiblanco para convertirlo en el sustituto de Simeone, y que tiene mucha complicidad con el delantero sueco, al que de hecho ha convertido en un estrella.
La pelea por Gyokeres se va a llevar hasta el final porque en el Metropolitano creen que si lo juntan con Julián, con Baena por detrás dando asistencias (todo hace indicar que Griezmann se marchará a Estados Unidos), el equipo estará en condiciones de pelear por todo. El tiempo será quien determine la elección del jugador, que deberá decantarse por la Premier o por la Liga.