¡Vaya pena!

Suiza y España empataron (1-1) en la quinta jornada de la fase de grupos de la Liga de las Naciones. Freuler hizo el gol de la victoria en la primera mitad y Gerard Moreno empató al final. Sergio Ramos falló dos penaltis. Con este resultado, el combinado de Luis Enrique necesita ganar a Alemania en La Cartuja para estar en la fase final.

Comenzó bien España. Cumpliendo a la perfección la idea de fútbol que tiene Luis Enrique, esa que se basa en controlar todos los aspectos del juego, presionar arriba y jugar en campo contrario. Es verdad que sin generar mucho peligro, sólo dos oportunidades de Dani Olmo y Ferran Torres inquietaron a la defensa suiza, el gran pero de la selección.

Con el paso de los minutos ese dominio total se fue equiparando. El combinado helvético tardó en llegar al partido, pero cuando lo hizo comenzó a generar peligro sobre la portería defendida por Unai Simón, la gran sorpresa en el once de España. Un fallo en la entrega de Fabián lo aprovechó Suiza, que robó un balón que terminó en las botas de Shaqiri, pero el jugador del Liverpool se encontró con una gran intervención del portero del Athletic. En esta ocasión la pelota no besó las redes españolas, pero ya nada sería igual.

Suiza dio el paso definitivo hacia adelante y el partido se igualó. Así comenzó a generar peligro y a la tercera oportunidad encontró el premio. Un balón en profundidad lo llevó Embolo hasta línea de fondo, levantó la cabeza, asistió y Freuler, demasiado solo dentro del área, puso el esférico de primeras en la escuadra del palo largo para hacer un golazo y adelantar al combinado local. El gol dejó tocada a una España que con el paso de los minutos volvió a reencontrarse con su juego, aunque seguía teniendo el mismo problema, no era capaz de hacer gol. Y eso que justo antes del descanso primero Oyarzabal y después Ferran gozaron de dos grandes oportunidades para lograr la igualada, pero nada.

Omnipresente Ramos

La segunda mitad comenzó con el mismo guion que terminó la primera. España dominaba, Suiza aguantaba y no llegaban las ocasiones claras de gol. El equipo local resistía sin grandes problemas las acometidas de los de Luis Enrique, hasta que un balón en largo de los suizos provocó una salida muy desafortunada de Unai Simón que Sergio Ramos evitó que fuese a mayores ya que sobre la línea salvó el gol de Seferovic. Fue la primera de las muchas intervenciones en las que el capitán fue protagonista.

Primero en defensa, después en ataque, cuando remató un córner que golpeó en la mano de Ricardo Rodríguez y el árbitro pitó penalti. El capitán fue el encargado de golpear desde los once metros, pero para sorpresa de todos Sommer le adivinó el lanzamiento y evitó el gol español. Ramos fallaba un penalti 23 disparos después. La pelota se marchó a por la línea de fondo y en el lanzamiento de esquina a punto estuvo de lograr la igualada con un gran testarazo, pero otra vez se topó con el meta rival.

La noche no quería sonreír ni a España y mucho menos al capitán. El combinado nacional buscaba el empate y este pudo llegar otra vez desde los once metros. Elvedi derribó dentro del área a Morata y el árbitro no dudó. Penalti y expulsión por doble amarilla. Lástima que el que sí iba a tener más dudas era Ramos, que tiró de valentía para repetir un lanzamiento con nula confianza donde volvió a errar. Por primera vez en 100 años de historia la selección española fallaba dos penas máximas en un partido.

Toma Moreno

España no perdió la fe y lo siguió intentando hasta el final. Y en estas Gerard Moreno recibió un centro desde la izquierda de Morata y de primeras definió para hacer el gol de la igualada. Un tanto que hacía justicia, pero servía para muy poco, ya que todo lo que no fuese ganar obligaba al combinado nacional a sumar los tres puntos ante Alemania.

El equipo nacional lo intentó y estuvo cerca de conseguirlo con un disparo de Adama que se marchó a las nubes. Definitivamente, no era el día. Sin tiempo para mucho más se acabo un partido que deja a España con un sabor de boca muy agridulce.