Messi se cita con Neymar en la final de la Copa América

La final esperada de la Copa América está servida. Si Brasil había ganado a Perú por la mínima y con apuros en su semifinal, Argentina lo pasó aún peor. Tuvo que esperar a una agónica tanda de penaltis para eliminar a Colombia con el meta Emiliano Martínez, que detuvo tres penaltis, como héroe de la albiceleste. Así que tendremos duelo Messi-Neymar y la enésima ocasión del crack argentino para saldar la deuda de títulos con su selección.

Esta vez el Maradona argentino no fue Messi sino el portero Emiliano Martínez, que se reencarnó en Goicoechea en el Mundial de Italia para convertirse en salvador de la patria albiceleste. Hasta tres lanzamientos detuvo el meta de Argentina para meter a su selección en la final de la Copa América.

Por cierto, la selección de Scaloni no juega a nada. Ni ataca ni defiende pero, a falta de fútbol, tira de futbolistas. Y de suerte. Igual que otras veces es Messi ante Colombia la mano de Dios fue la de Emiliano Martínez con su prodigiosa actuación en los penaltis.

Fue mejor Colombia, que encajó el gol a las primeras de cambio. A los siete minutos Lo Celso se asoció con Messi, que puso un buen pase atrás en el área para que Lautaro batiera a Ospina. Como otras veces, la albiceleste encontró el gol antes que el fútbol.

Reaccionó Colombia, que debió empatar antes del descanso pero tardó en encontrar el gol. Fue con la aparición de uno de los jugadores revelación de esta Copa América: Luis Díaz. El extremo del Oporto remontó el carril izquierdo, reventó a Pezzella y la puso por encima de la salida de Emiliano Martínez.

Argentina no reaccionó hasta que Di María pisó el campo avanzada ya la segunda mitad. En la prórroga los de Scaloni tuvieron dos opciones para marcar. Primero con un disparo al palo de Messi y luego con un gol cantado que marró Lautaro. Así que, como en el España-Italia de la Eurocopa, nos fuimos a los penaltis.

La suerte (y Emiliano Martínez) sonrieron a Argentina, que se mete en la final de la Copa América, otra oportunidad para que Messi salde la deuda futbolística que tiene con su selección en forma de títulos. Será ante la Brasil de Neymar y en su campo. Casi nada.