Más problemas para Morata

Álvaro Morata tiene cada vez más difícil hacer realidad su fichaje por el Barcelona, al que no paran de surgir obstáculos en el camino hacia un deseo personal del madrileño. Las dificultades del Barça con el límite salarial, la llegada de Ferran, el resurgimiento de Luuk de Jong, la negativa de Massimiliano Allegri, la falta de un recambio en la Juventus y la última, la lesión de Federico Chiesa en el cuadro bianconeri, ponen en chino la posibilidad de que recale en este mes de enero en el Camp Nou.

La Juventus informaba este lunes que Chiesa, que tuvo que retirarse antes de tiempo del Roma-Juventus, sufría una lesión en el ligamento cruzado anterior de su rodilla, por lo que en principio se pierde lo que resta de temporada. Allegri pierde con él a uno de sus titularísimos, clave en sus esquemas y que moverá el árbol en busca de un jugador que gane protagonismo ante su baja. Morata fue suplente y entró pasada la hora de partido en lugar de Moise Kean, el que fue el 9 titular de los italianos.

Actualización sobre @federicochiesa luego del #RomaJuve.

— JuventusFC (@juventusfces) January 10, 2022

La baja de Chiesa merma más si cabe las opciones de salir de la Juve a Morata. Días atrás, Allegri fue muy contundente respecto a la posibilidad de que el delantero saliera en este mercado invernal ante los rumores emergentes desde Barcelona. «Álvaro Morata no se va, es un futbolista de rendimiento. Su problema es que le ponen etiquetas equivocadas, pero es muy importante: hablé con él y le dije que no se mueve de aquí. Discurso cerrado», expresó el entrenador del conjunto turinés en sala de prensa.

Fue algo que no sentó bien a Morata, conocedor del interés del Barça en él y por el que muestra una rotunda predisposición de cara a este mercado invernal. Está contando con minutos en la Juventus, donde suma 25 partidos –19 como titular– y casi 1.700 minutos de juego, en los que firmó siete goles y cuatro asistencias.

Su salida de Turín sólo era viable si antes la dirección deportiva bianconeri encontraba una opción en el mercado que le sustituyera. El nombre de Mauro Icardi surgió ante su posible salida del Paris Saint Germain, que tendría como destino Turín. De darse esta posibilidad, quedaría algún resquicio para Morata, al que se permitirían que negociara los términos de una posible cesión. Cabe recordar que el madrileño está cedido por el Atlético de Madrid, por el que pagaron 20 millones por sus dos años a préstamo y por el que guardan una opción de compra de 35 millones.

Pese a todo, el principal escollo que tendría Morata para llegar al Barça reside en el propio club culé. Desde la cúpula siguen trabajando en varios escenarios para lograr que su segundo fichaje, Ferran Torres, sea inscrito ante LaLiga. De momento, pese a la salida de Philippe Coutinho y la renovación a la baja de Samuel Umtiti, el Barça no ha materializado su inscripción, por lo que aún siguen liados con un límite salarial que les asfixia.

El Barça sólo se fijaría en Morata una vez que logre agilizar salidas importantes que permitan encajar el también elevado salario del delantero. Sin diversas marchas, que den ingresos o que ofrezcan margen con el límite salarial, las posibilidades del delantero de recalar en el Camp Nou son de cero. Además, en los últimos partidos el rendimiento de Luuk de Jong parece repuntar y Xavi ya ha manifestado que está satisfecho con su rendimiento, algo que podría cambiar su situación y permitirle continuar hasta final de temporada. La recuperación de Memphis Depay, Martin Braithwaite y Ansu Fati no exige tanta premura con un delantero a los culés.