El jefe médico de la Premier pronostica estadios con aforos reducidos la próxima temporada

El fútbol tardará más de lo esperado en volver a la normalidad. Al menos, así lo pronostica el jefe médico de la Premier League. Mark Gillett ve «poco probable» que los estadios se puedan llenar la próxima temporada. Según sus pronósticos, los partidos se seguirán jugando a puerta cerrada, como mínimo, hasta mediados de noviembre y a partir de entonces se reduciría considerablemente la asistencia, controlando el aforo.

Todo hace indicar que la temporada 2020-21, al igual que lo que queda de esta, se jugará a puerta cerrada en sus primeras jornadas. Sin embargo, la desescalada en el fútbol preveía que a lo largo del curso se pudiesen ver de nuevo los estadios llenos, algo que ahora el jefe médico de la Premier ha descartado. La prioridad una vez superado el pico de la crisis del coronavirus pasa por respetar las medidas sanitarias, por ello podría darse el caso de que los estadios, aunque no estén vacíos, no lleguen ni a la mitad de su capacidad.

Las palabras de Gillett suponen un revés para los clubes ingleses. Gran parte de sus ingresos proceden de la venta de entradas y de la explotación de los estadios los días de partido, en lo referente a la venta de productos y los distintos servicios que se ofrecen. Una cantidad que se vería muy mermada si finalmente no se permite llenar los estadios durante toda la temporada.

Se estima que el presupuesto de equipos como el Manchester United, el Liverpool o el Arsenal, que son dos de los clubes de la primera división que más ingresan por derechos televisivos, depende en un 25% de los ingresos obtenidos en los partidos que juegan como locales. Si ven como se reduce considerablemente el aforo de sus estadios por evitar el riesgo de contagio, el agujero en sus cuentas sería más que considerable.