Guerra civil en Ferrari: Sainz y Leclerc casi llegan a las manos después del Gran Premio de España
Carlos Sainz se ha visto envuelto en una cruenta guerra con su compañero de equipo en Ferrari Charles Leclerc. Las cartas parecen estar sobre la mesa y después de mucho tiempo de compadreo ambos pilotos han dicho basta. Al monegasco no le hizo ni pizca de gracia que su compañero le adelantase durante el Gran Premio de España y luego habló mal de él en zona mixta.
«Fue un poco vergonzoso lo que hizo. Dañé mi alerón porque Carlos hizo la curva y no vio que estaba dentro. Es un poco innecesario, pero también entiendo que es su carrera de casa y también es un momento importante de su carrera. Supongo que quería hacer algo un poco espectacular», dijo Leclerc sobre la acción que puso a Sainz en posiciones de podio al principio de la carrera.
Leclerc quiso seguir haciendo mella en la herida después de que Sainz sí le dejase pasar en la parte final de la carrera para sumar un quinto puesto mientras que el madrileño se conformó con un sexto. «Para mí ese adelantamiento no fue nada. Probablemente yo no era la persona adecuada para hacerlo», aseveró.
Carlos Sainz, por su parte, no se cortó ni un pelo al conocer lo que había dicho Leclerc y le respondió con bala. «Creo que son demasiadas veces las que se queja después de la carrera. Honestamente creo que en este momento de la temporada no tenemos que estar quejándonos de estas cosas. Le pase porque vi que iba lento, no sé si cometió un error o estaba guardando ruedas, pero lo hice», dijo.
uh-oh, a tense atmosphere had developed 😬 pic.twitter.com/O5fvcejfpd
— gen (@forsainz) June 23, 2024
Leclerc, por su parte, aseguró que Ferrari les había dado las instrucciones claras para que preservaran los neumáticos en esa fase de la carrera. «Lo hablamos antes y esa era la orden. Nos dijeron claramente que había que guardar», aseveró el monegasco.
Al término de las ruedas de prensa a ambos pilotos se les pudo ver discutir públicamente en la puerta del box de Ferrari evidenciando que la situación y el clima actual en la Scuderia no es el más propicio. Y eso que todavía no ha aterrizado un siete veces campeón como Lewis Hamilton, quien seguro tampoco tendrá demasiado tacto con el quejica Leclerc.