«Estamos creando un monstruo con Neymar»
Con la caída del PSG en el Bernabéu han llovido las críticas contra el conjunto parisino y en especial contra Neymar. El ex internacional brasileño, Walter Casagrande, ha sido el último en sumarse al carro contra el jugador y criticar duramente la actuación de Ney en unas declaraciones para SporTV.
«Me incomoda que los aficionados y los medios brasileños sigan defendiendo a Neymar cuando él ya ha demostrado en distintas ocasiones un comportamiento que van contra la colectividad del fútbol, de niño mimado y que ponen en riesgo a su equipo. Ayer vio una amarilla innecesaria en la primera parte y con una falta o simulación en la segunda el árbitro le habría echado y sería desastroso. Eso puede pasar en el Mundial. Yo no me incluyo en este colectivo que le da excusas para todo. ¡Estamos creando un monstruo!», afirmó Casagrande.
El ex jugador del Corinthians, Oporto y el Torino, mostró su temor por las actitudes del brasileño de cara al Mundial de Rusia: «Ayer se llevó una tarjeta en el primer tiempo. Con una falta en el segundo lo habría echado el árbitro. Sería desastroso si lo hiciera en el Mundial».
«Lo que teníamos que hacer es corregir su comportamiento para que el monstruo pueda se transformar en genio. No estamos colaborando con Neymar. Le estamos haciendo un deservicio. Mucha gente cree que yo tengo manía con él. No tengo manía con él. Le quiero arreglar», añadió el comentarista.
Finalmente, Casagrande comparó al jugador con los grandes craks del fútbol: «Todavía no tiene la talla de Pelé, Maradona, Messi o Cristiano Ronaldo para que los equipos puedan jugar para él» y que, mientras no se le critique, el delantero no podrá llegar a alcanzar todo su potencial.
La respuesta del padre de Ney
La respuesta por parte del entorno del jugador no tardó en llegar. Neymar padre contestó a Casagrande con una publicación en Instagram en la que tachó al comentarista de oportunista: «buitre».
«En el universo del fútbol conocemos muchas personas que se comportan como buitres, a veces se aprovechan de un micrófono y de una carrera de jugador. No digo atleta porque tuvo comportamientos cuanto menos cuestionables fuera de los campos. Aprovechan una derrota, una batalla perdida, para atacar y alimentar sus egos como buitres que se alimentan de carnaza».