El Elche homenajea a Saúl en su vuelta a casa
Saúl ha vuelto a casa por la puerta grande. El Martínez Valero le rindió un pequeño homenaje minutos antes de que comenzara el encuentro. Es uno de los jugadores, por no decir el más, ilustres que ha pasado por la cantera del cuadro ilicitano. 11 año después ha regresado y el club le hizo entrega de una placa conmemorativa, acompañado de una camiseta con su nombre y el dorsal 8 de la mano de un benjamín de la cantera franjiverde y de su familia, entre los que se encontraba su padre que también jugó en el Elche, José Antonio Ñíguez, más conocido como Boria.
A su vez, todo el estadio le brindó una calurosa ovación que puso la piel de gallina al 8 rojiblanco. Es un partido muy especial para el Saúl. Volvía a su ciudad natal para enfrentarse para al equipo que le vio crecer. Allí dio sus primeros pasos como futbolista y llamó la atención de los grande clubes. Poco después, con 11 años, se marchó al Real Madrid para dos años después emprender rumbo al club que ocupa una mitad de su corazón, el Atlético.
La otra mitad, como demuestra su tatuaje, le pertenece al Elche. De ahí que no se haya querido perder este encuentro de ninguna manera. Eso sí, comenzó el choque en el banquillo, puesto que es uno de los jugadores que todavía no había descansado ningún minuto. Simeone decidió llevárselo por lo especial que es el partido para él pero prefirió no arriesgar y le dejó en el banquillo.