Curry reaparece para poner a Golden State a un partido del título
Stephen Curry recuperó su magia en el día D. El MVP de la NBA, tras tres partidos lejos de su nivel en las Finales, se sacó de la manga un cuarto que deja visto para sentencia la lucha por el anillo. «Los mejores aparecen cuando más se les necesita», avisó su entrenador Steve Kerr, ex compañero de Michael Jordan en los Bulls. El base irrumpió como un ciclón en ‘The Q’ con 38 puntos y siete triples, a cada cual más complicado y circense.
Los Warriors, tras recibir una soberana paliza en el tercer partido de las Finales, necesitaban dar un golpe sobre la mesa y lo consiguieron. Nunca en la historia de las Finales se ha conseguido remontar un 3-1 adverso y hay 33 precedentes que lo atestiguan. Los vigentes campeones tendrán la primera oportunidad de revalidar su título el próximo lunes en su cancha en la bahía de San Francisco.
El partido tuvo muchos matices, pero una decisión del entrenador de Cleveland Tyrone Lue terminó por decantar la balanza hacia los campeones. El técnico novato decidió cumplir con los deseos de sus estrellas en lugar de pensar como un entrenador sensato. Tres de los cinco titulares superaron los 43 minutos de juego, una auténtica barbaridad.
Cleveland se quedó sin gasolina en el último cuarto. Sin ideas para atacar, ni piernas para correr detrás de Stephen Curry, los de Ohio fueron un juguete a merced de los triples de los californianos, que batieron el récord histórico estableciendo una nueva marca en 17 en un sólo partido.
Los últimos minutos dejaron imágenes para la polémica. LeBron James se picó primero con Draymond Green y después con Stephen Curry llegando a las manos con el primero y discutiendo a gritos con el segundo. No son buenos síntomas para unos Cavaliers que se han quedado sin margen de error. «Es increíble que sólo haya tirado cuatro tiros libres en todo el partido», se quejó LeBron. Lo mismo podría haber dicho Curry de los dos primeros partidos, cuando no fue en ninguna ocasión a la línea de personal. Hay estilos y estilos de saber perder.