«Cristiano somos todos»
«Cristiano somos todos». Estas son las palabras que resuenan en el vestuario del Real Madrid y reflejan lo que siente una plantilla que es consciente que la suerte de Cristiano será la suya y la de todos los aficionados en un futuro próximo. Los jugadores, Zidane y el club apoyan al máximo a la estrella del equipo que explotó en su primera comparecencia pública en mucho tiempo después de hacer un doblete y dar un golpe sobre la mesa ante en Dortmund.
Porque Cristiano se siente «acosado, maltratado y en el centro de todas las dianas». El luso no entiende toda la persecución de una parte de la opinión pública que no le respeta de la misma forma que a otros futbolistas a pesar de sus excelentes estadísticas, palmarés y que en el próximo mes de enero recogerá su quinto Balón de Oro.
Y sus compañeros de vestuario entienden perfectamente el sentir del jugador portugués. La plantilla madridista piensa que las críticas se ceban con él y que no se le respeta igual que a otros cracks del fútbol mundial que juegan en la Liga. Sin citarlo, todos piensan en un Messi que es alabado semana tras semana a pesar de que el delantero del Real Madrid ha mostrado un mejor rendimiento durante los últimos años. Esto no es una opinión, las estadísticas lo dicen.
«Parece que tengo que demostrar partido a partido lo que soy, me sorprende la opinión publica». Estas fueron las palabras que resumieron el sentir de un Cristiano que se siente perseguido después de su presunto delito fiscal, de las falsedades que se publican día tras día y de las críticas infundadas a su juego cuando, por mala fortuna (mandó dos tiros al palo), enlaza dos partidos consecutivos sin marcar.
Por ello, todos los estamentos dentro de la entidad están con Cristiano. De hecho, la primera demostración se verá en una semanas cuando el club anuncie la renovación de su contrato que traerá consigo un aumento de su sueldo hasta los 30 millones limpios por temporada. Lejos de Madrid parece que muchos no le respetan pero en el club quieren demostrarle su amor dándole un salario más que merecido.