Tres partidos sin marcar y en caída libre con la Juventus

Cristiano Ronaldo se asoma al precipicio

Cristiano Ronaldo va cuesta abajo y sin frenos en la recta final de temporada con la Juventus: tres partidos sin marcar, su equipo sin opciones de luchar por el título y su adiós, más cerca.

Cristiano Ronaldo se asoma al precipicio
Cristiano Ronaldo, abatido tras fallar una ocasión ante la Fiorentina. (AFP)

Son tiempos difíciles para Cristiano Ronaldo. El portugués está ante uno de sus peores rachas deportivas de lo que se recuerda en los últimos años en las filas de la Juventus. El hombre gol que parecía reinar en Turín está pasando horas bajas con los bianconeris, que tienen casi matemáticamente y virtualmente perdida la Serie A y el Scudetto (a 13 del Inter de Milán con solo 15 puntos por disputar) y que podría estar en serios problemas para estar la próxima temporada en la Champions League.

Cristiano Ronaldo lleva sin aparecer entre los goleadores de la Juventus desde el 7 de abril. Suyo fue el importantísimo gol que abrió la lata ante el Nápoles, en un partido durísimo por la lucha por una plaza para la Champions League. El gol de luso permitió romper el 0-0 y dio alas a los juventinos en el casa. El partido acabaría 2-1 y los tres puntos del lado de los bianconeri. Desde entonces, tres partidos disputados después, Cristiano sigue igual y no ha vuelto a ver puerta pese a jugar 270 minutos.

Fue notoria y polémica su actitud en el siguiente partido tras la victoria ante el Nápoles. Llegaba el Genoa a Turín. Fue un partido ciertamente cómodo para la Juve. En el ecuador del primer tiempo los juventinos ya ganaban 2-0 con los goles de Kulusevski y Morata. Scamacca hacía el 2-1 tras el descanso pero McKennie ampliaba poco después para el 3-1 definitivo. Sin embargo, la victoria y tres puntos parecía no contentar a CR7 que iba de camino al túnel de vestuarios notablemente tocado, cabizbajo.

En Italia fue público que de camino al vestuario, el portugués dio puñetazos a la pared antes de marcharse sin hablar absolutamente con nadie, sin abrir la boca. Sus demonios internos, su autoexigencia y su falta de puntería eran los males del portugués que estaba ajeno al triunfo y tres puntos que había conseguido el equipo.

El siguiente partido, ante el Atalanta, se comunicó la baja de Cristiano Ronaldo para este partido. El anuncio oficial fue una lesión en el flexor de la cadera, por lo que quedaba fuera de la convocatoria para jugar en Bérgamo. La Juve caía 1-0, otro golpe en la clasificación y otro mar de dudas. Tras esto y la recuperación del luso, llegarían el Parma y la Fiorentina. En ninguno de los dos partidos el portugués aportó algo. Nada. Ni asistencia ni gol para el triunfo ante el Parma por 3-1 ni en el pinchazo ante la Fiorentina (1-1).

De hecho, en este último encuentro, el que acabó 1-1, Cristiano Ronaldo gozó de una ocasión clarísima de gol en los compases finales. Kulusevski le servía una pelota templada para el remate fácil del portugués, con toda la portería para él y el portero vendido. No llegó a cabecear, solo a rozar, y la oportunidad se disipaba. El gesto de Cristiano era claro: decepción. Otro partido más en el que su cifra goleadora sigue estática.

Pese a ello, la racha negativa de Cristiano no tapa los grandes números que ha ido acumulando el portugués este curso. Lleva 36 partidos con la Juventus en los que ha sumado 32 goles y cinco asistencias. No han servido, sin embargo, para que la Juventus sea competitiva esta temporada ni en Champions League –apeada en los cuartos de final ante el Oporto–, ni en la Serie A, alejada hace tiempo del Scudetto y con opciones reales de quedarse sin plaza para la próxima Champions. Los de Turín son cuartos con 66 puntos igualados con el Milán en la tercera plaza aunque con un partido menos. El Nápoles, con 63 puntos, está quinto aunque tiene un partido menos.

Su marcha de Turín, asegurada

Las críticas están comenzando a rondar en Turín en torno a la figura de Cristiano Ronaldo. Los tifosis le tienen en la diana su gran salario. Está muy presente los 30 millones netos por campaña que percibe el portugués vistiendo la bianconeri, también los 87 que cuesta en cada balance y ejercicio al club para mantener al futbolista en el vestuario turinés. Su último partido ante la Fiorentina fue muy criticado y ya hay voces que piden su marcha inmediata.

Esto lleva ya tiempo rondándole al portugués, que considera que su etapa en la Juventus terminará esta temporada. Cristiano tiene aún otra temporada más firmada con los italianos pero su intención es buscar un nuevo destino en el que estar más cómodo la próxima temporada. Los problemas financieros de la Juventus, ahora sin la Superliga, pesan mucho en Turín, que ven con buenos ojos desprenderse de los emolumentos y coste del portugués.

OKDIARIO ya informó hace un mes de que el Real Madrid cierra la puerta a un regreso del portugués al Santiago Bernabéu pese a las filtraciones de Jorge Mendes que apuntaron a ello. Con esta vía cerrada, las posibilidades de Cristiano son el Paris Saint Germain, ante la más que posible marcha de Mbappé rumbo a Madrid, y el Manchester United, donde se produciría un regreso soñado donde creció como futbolista.

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