El fichaje es Bale
Bale volvió a lo grande. Y es que su regreso dos meses después de la lesión en Dortmund era el máximo aliciente de la vuelta del choque copero del Real Madrid ante el Fuenlabrada. El galés salió desde el banquillo a falta de 30 minutos cuando el equipo perdía y el Bernabéu silbaba y en el primer balón que tocó, dio una asistencia perfecta para que Borja Mayoral hiciera el tanto del empate (1-1).
Y es que, el que más sonríe con la vuelta de Bale es un Zinedine Zidane que siempre confió en él a pesar de sus continuas lesiones. En la rueda de prensa previa al partido dejó claro que echa de menos ver a la BBC sobre un terreno de juego y esto fue un piropo para un jugador del que muchos se han olvidado. Especialmente, después de una lesión en Alemania que parecía menor y que se ha ido complicando.
La sensación de que siempre que está a un gran nivel se lesiona es palpable en las gradas del Bernabéu pero los aficionados del Real Madrid le recibieron como un héroe cuando saltó al campo a la hora de partido. El equipo perdía y el público necesitaba de ilusiones. Y claro, el galés cumplió desde el primer balón que tocó. Cuando no llevaba ni siquiera un minuto en el campo, el británico recibió un balón en la banda derecha y puso un centro con el exterior perfecto para que Mayoral hiciera el gol del empate. Bale volvía a lo grande.
Y también participó en el segundo de Borja Mayoral. El galés se llevó el balón con una buena espuela y definió pero el portero se la sacó bien. El rechace lo enganchó otra vez el delantero para hacer el segundo tanto del Real Madrid y alejar de forma definitiva los fantasmas que asolaban al Bernabéu hasta que entró el galés al terreno de juego. Su entrada había supuesto una inyección de ilusión para el equipo y eso se estaba demostrando en el verde.
Ovación del Bernabéu
Los aficionados madridistas tenían ganas de Gareth Bale y lo demostraron cuando saltó al terreno de juego en el minuto 60 de partido. Cuando salió a calentar, muchos aplausos rompieron el silencio de un Bernabéu incomodado por la situación del partido y este estalló cuando apareció por el verde algo más de dos meses después.
Porque, si las lesiones le respetan, Bale debe ser clave en la recuperación de un Real Madrid que le necesita. A comienzos de temporada tuvo que escuchar algunos pitos (en el duelo ante el Valencia) pero sus buenos partidos en Anoeta y Dortmund, antes de lesionarse, volvieron a dejar claro que el británico es un jugador descomunal y puede ser muy importante si está en plenas facultades físicas.