Ni limonero ni naranjo: la planta que recomiendan los expertos en otoño y que da frutos todo el año
La forma definitiva para eliminar los pesticidas de la fruta
Crece hasta en un envase de yogur y da frutos sin descanso
Tomate de árbol: un superalimento exótico para tu dieta
Parece Laponia pero el pueblo más mágico para Navidad está en Pirineos y es el favorito de Pedro Sánchez
El aviso de una farmacéutica sobre la crema azul Nivea de toda la vida: "Puede resultar algo..."
Durante los meses fríos, muchos cultivos de exterior detienen su desarrollo y esperan el regreso del calor. Sin embargo, existen excepciones. Una de ellas se ganó merecidamente un lugar especial entre los aficionados al cultivo doméstico. Y es que su principal ventaja es su capacidad de producir frutos todo el año, incluso cuando las temperaturas bajan.
Además, no requiere un gran espacio ni herramientas específicas: un pequeño tiesto o incluso un envase reciclado bastan para verla crecer. De esta manera, su resistencia, simplicidad y productividad la han situado entre las preferidas de los expertos para el otoño.
¿Cuál es la planta más recomendada para el otoño y que da frutos todo el año?
La tendencia de crear pequeños huertos urbanos se ha consolidado en los últimos años. Con el auge de la vida en pisos, el cultivo de especies comestibles en macetas ha permitido mantener la conexión con la naturaleza sin necesidad de jardín. En este contexto, el tomate cherry se ha convertido en una de las opciones preferidas.
Esta planta, originaria de América Central, combina productividad con facilidad de cultivo. Puede crecer en interior si la temperatura se mantiene entre 18 °C y 25 °C y recibe al menos seis horas de luz al día, ya sea natural o artificial. En estas condiciones, desarrolla una floración continua que garantiza frutos todo el año.
Además, el tomate cherry se adapta bien a macetas pequeñas y es ideal para colocar en la cocina o en una ventana soleada. Su sistema radicular compacto permite cultivarlo incluso en recipientes reciclados, como envases de yogur, sin que esto afecte a su rendimiento.
Cuidados básicos de la planta de tomate cherry para un otoño productivo
El éxito de este cultivo depende de algunos cuidados sencillos. Las semillas deben sembrarse a poca profundidad, cubiertas con un sustrato húmedo pero no saturado. En otoño, el exceso de agua puede generar hongos o pudrición, por lo que conviene dejar que la superficie se seque antes de volver a regar.
A continuación, se detallan otros consejos útiles al respecto:
- Mantener una temperatura constante y evitar las corrientes de aire.
- Aplicar abono orgánico cada tres semanas para estimular la floración.
- Podar ligeramente las ramas laterales para concentrar energía en los frutos.
- Colocar la maceta sobre una bandeja con grava húmeda, creando un microclima sin encharcar las raíces.
Estos cuidados permiten que la planta mantenga su ritmo natural de crecimiento y continúe dando frutos todo el año, incluso en interiores con calefacción.
Cómo proteger a la planta de tomate frente a plagas y poder tener frutos todo el año
A pesar de su resistencia, el tomate cherry puede atraer insectos como el pulgón, especialmente si comparte espacio con otras plantas ornamentales.
Para evitarlo, los expertos recomiendan tratamientos ecológicos, como pulverizar jabón potásico o usar infusiones de ajo. Ambos métodos mantienen a raya las plagas sin dañar la planta ni alterar la calidad de los frutos.
Como fertilizante casero, las cáscaras de plátano secas y trituradas resultan muy efectivas. Su alto contenido en potasio fortalece los tallos y favorece la formación de flores, lo que prolonga la producción durante todo el año.
Propiedades, variedades y origen del tomate cherry
El tomate cherry, también conocido como tomate cereza o tomate uva, pertenece a la especie Solanum lycopersicum var. cerasiforme. Su origen se remonta a las regiones costeras de Perú y Ecuador, aunque su desarrollo actual es resultado del cruce entre especies silvestres y tomates cultivados.
Fue introducido en Europa en el siglo XVI y no alcanzó popularidad hasta el siglo XX, cuando se empezó a valorar su tamaño práctico y sabor equilibrado.
Existen múltiples variedades:
- Cherry rojo clásico, de sabor dulce y piel fina.
- Cherry pera, más alargado y con pulpa firme.
- Cherry amarillo, de gusto más suave y menos ácido.
- Cherry negro o morado, con matices intensos y alto contenido antioxidante.
Además de su productividad, el tomate cherry destaca por su valor nutricional. Es fuente natural de vitamina C, licopeno y betacarotenos, compuestos que contribuyen a la protección celular y al fortalecimiento del sistema inmunitario. Su alto contenido en agua lo convierte en un alimento ligero, ideal para ensaladas o guarniciones.