Patatas

Un experto lanza un dramático aviso sobre las patatas con brotes. Ten cuidado, están por todas partes

Las patatas con brotes pueden ser un riesgo para la salud. Estos son los consejos de un experto

Esta es la forma más sana de comer patatas (y no, no son hervidas)

Datos curiosos sobre la patata que probablemente no conocías

patatas con brotes
El aviso de un experto sobre las patatas con brotes
Blanca Espada

Las patatas son uno de los alimentos más consumidos y versátiles de nuestra gastronomía, pero también pueden esconder un peligro para nuestra salud si no las conservamos adecuadamente. Se trata de los brotes que les salen cuando se almacenan durante mucho tiempo o en condiciones de luz y humedad. Estos brotes no solo afectan al sabor y la textura de las patatas, sino que parece que pueden afectarnos a la salud, por ello, debemos tener cuidado y también, seguir los consejos que ha revelado un experto que de hecho, ha lanzado un dramático aviso sobre las patatas con brotes.

El dramático aviso de un experto de las patatas con brotes

Tener patatas con brotes en casa es algo más fácil de lo que parece. Basta con que dejes unas cuantas patatas en la despensa o en el verdulero durante varios días o semanas, y te darás cuenta que con el tiempo es fácil que aparezcan brotes que en algunos casos suelen tener un color amarillento, mientras que en otros pueden ser verdes.

Estos brotes contienen solanina que es un compuesto que se encuentra de forma natural en las patatas y otras plantas de la familia de las solanáceas, como los tomates o las berenjenas. Su función es proteger a la planta de las plagas y las agresiones externas, pero si se ingiere en grandes cantidades puede ser nocivo para el organismo humano.

Por ello, se suele aconsejar quitarlos antes de pelar la patata y cocinarla. Sin embargo, un experto en nutrición ha alertado sobre esto también ya que advierte que debemos tener mucho más cuidado del que cabría pensar a priori.

Miguel Ángel Luruea, quien es doctor en ciencia alimentaría así como divulgador científico en redes sociales, ha publicado un interesante hilo en Twitter en el que advierte sobre las patatas que tienen brotes.

Primero de todo explica que el hecho de que las patatas tengan cada vez más brotes se debe al clorprofam, sustancia en polvo que era utilizada en el cultivo de las patatas para evitar su germinación. Sin embargo, ahora está prohibido de modo que es más fácil que nuestras apreciadas patatas acaben germinando y aparezcan esos brotes antes de tiempo y además, en mayor cantidad.

El experto explica que la solución para eliminar esos brotes será primero de todo conservar bien las patatas. Para ello recomienda elegir un lugar fresco y oscuro, aunque debemos evitar que sea la nevera.

Por otro lado, Luruea aconseja no dejar las patatas almacenadas mucho tiempo. Es mejor consumirlas en un periodo de tiempo corto, no solo para evitar los brotes, sino de hecho, para evitar también que el propio almidón presente en las patatas se descomponga en los azúcares también presentes y de este modo que al comerlas notemos las patatas con un sabor dulzón.

Además, al cocer o asar las patatas, ese exceso de azúcar facilita las reacciones de Maillard, que es cuando las patatas se ponen más oscuras al cocinarse y se produce más acrilamida, una sustancia que puede ser nociva.

Por último, Luruea aconseja que en el caso de que las patatas ya tengan brotes y queremos cocinarlas,  podemos elegir hervirlas, o también, sofreírlas o asarlas por poco rato o a fuego no muy fuerte.

Los riesgos de la solanina en las patatas

De todos modos, lo mejor que podemos hacer es evitar patatas con brotes o procurar eliminar bien los que ya estén presentes y también, pelar bien las patatas, ya que la piel también contiene más solanina que el interior. Lo tercero es como explica el experto, cocinarlas correctamente.

Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), debemos tener cuidado con la solanina, ya que la dosis más baja a la que se observan efectos no deseados es de 1 miligramo por kilo de peso corporal al día. Los síntomas más comunes son náuseas, vómitos, diarrea, dolor de cabeza, fiebre o debilidad.

De este modo, si las patatas tienen muchos brotes o están muy verdes, lo mejor es desecharlas, ya que el riesgo de intoxicación es mayor. Además, hay que tener especial cuidado con los niños y los bebés, ya que son más sensibles a los efectos de la solanina y pueden alcanzar niveles tóxicos con menos cantidad1. Por último, hay que recordar que no solo las patatas frescas pueden tener solanina, sino también algunos productos derivados como las patatas fritas o los purés instantáneos.

En definitiva, las patatas con brotes pueden ser un problema para nuestra salud si no las tratamos correctamente. Por eso, es importante comprar solo las patatas que vayamos a consumir en poco tiempo, conservarlas en condiciones óptimas y eliminar los brotes y las zonas verdes antes de cocinarlas. Así podremos disfrutar de este alimento tan nutritivo y delicioso sin riesgos innecesarios.

Lo último en Curiosidades

Últimas noticias