Revolución en las aulas: un sindicato pide a Puig menos alumnos por clase para más calidad educativa
La Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF) ha dirigido un escrito a la Consejería de Educación que en el Gobierno valenciano que preside el socialista Ximo Puig dirige Raquel Tamarit (Compromís) para reclamar un aumento de profesores a la vez que una reducción del número de alumnos por aula y el desdoble del profesorado en las aulas de Formación Profesional. Solicita la apertura inminente de negociaciones con la finalidad de rediseñar plantillas para empezar con ese nuevo diseño el curso 23/24. El objetivo es aumentar la calidad educativa y reducir el fracaso escolar con una atención más personalizada, bajando el número de alumnos por aula hasta casi el 50% en algunos casos, según los datos aportados por el propio sindicato.
Tanto Cataluña como Madrid y Andalucía, entre otras autonomías, están dando los pasos pertinentes hacia una reducción paulatina de ratios por aula. En este contexto estatal, el sindicato CSIF también ha reclamado en el ámbito de la Comunidad Valenciana una bajada generalizada de los ratios en todas etapas educativas, al objeto de que el próximo curso pueda ponerse en marcha una atención más personalizada a cada alumno y que esté realmente centrada en las necesidades académicas de cada niño.
El problema de base, según defiende este sindicato, estriba en las ratios elevadas y la falta de desdobles y refuerzos del alumnado. Ratios que consideran superiores a los de cursos precedentes en los que la Consejería sí aplicó una reducción de alumnos por aula, pero en este caso por la pandemia. Y defiende también que su aplicación en zonas deprimidas supondría también otra herramienta en la lucha contra la despoblación.
En estimaciones del sindicato, a través de su responsable de Educación en la Comunidad Valenciana José Seco, «si hay menos alumnos, se les puede dedicar más tiempo y enseñarles de una manera más personalizada». En concreto, y según los datos aportados por Seco, las ratios en la Comunidad Valenciana se encuentran actualmente en 25 alumnos tanto en Educación Infantil como en Primaria, 30 en Secundaria y 35 en Bachillerato.
El objetivo final que plantea el sindicato es reducir esta cifra a una ratio de 20 alumnos por clase en todos los niveles, lo que en algunos significa bajar cerca del 50% de ese ratio e incrementar a la vez el profesorado para ofrecer una Educación más personalizada.