¿Es verdad que podemos escuchar con los oídos tapados?

La sensación de tener los oídos tapados puede ser desconcertante e incómoda. Este fenómeno es conocido como “plenitud auricular” y puede afectar la calidad de vida, además de generar muchas molestias. Existen varias causas comunes de esta sensación, y es importante reconocer los síntomas para tratarla de manera adecuada.

Un síntoma común de este problema es notar que los sonidos se escuchan más bajos o menos claros de lo habitual. Esto se conoce como “pérdida temporal parcial de la audición”. Así mismo, algunas personas notan que su propia voz suena extraña o amortiguada. Sin embargo, es muy raro que se pierda por completo la escucha. ¿Por qué ocurre esto? ¿Cómo combatirlo?

El sentido del oído se basa en la captación de ondas sonoras que viajan a través del aire y que son recogidas por el oído. El sonido entra por el canal auditivo, donde las ondas sonoras hacen vibrar el tímpano. Estas vibraciones se transmiten a los huesecillos del oído medio y, finalmente, al oído interno, donde se convierten en impulsos nerviosos que el cerebro interpreta como sonido.

Oídos tapados: ¿qué ocurre?

Cuando tenemos los oídos tapados, ya sea por un tapón de cera, agua, o simplemente al cubrirlos con las manos, la capacidad de recibir ondas sonoras se ve afectada. Sin embargo, esto no significa que no podamos escuchar en absoluto. La percepción del sonido puede cambiar, pero todavía es posible captar algunos ruidos.

• Sonidos internos: cuando los oídos están tapados, podemos escuchar más claramente los sonidos internos del cuerpo, como el latido del corazón o la respiración. Esto se debe a que los sonidos se transmiten a través de los huesos y tejidos del cuerpo, lo que permite que algunas vibraciones se perciban incluso con los oídos bloqueados.
• Vibraciones a través del suelo: también es posible escuchar sonidos a través de vibraciones en el suelo. Por ejemplo, si alguien está caminando cerca de ti o si hay música a un volumen alto, puedes sentir las vibraciones y, aunque no escuches los sonidos de manera nítida, puedes tener una percepción de ellos.
• Frecuencia de los sonidos: algunos sonidos, especialmente aquellos de baja frecuencia, pueden ser más fáciles de percibir incluso con los oídos tapados. La capacidad de escuchar puede variar según la persona y la situación.

¿Por qué se tapan los oídos?

La obstrucción de los oídos puede ser causada por diversos factores internos y externos. Estos bloqueos a veces afectan la audición y el equilibrio. Con frecuencia, también provocan dolor y malestar. Las causas comunes de los oídos tapados son las siguientes:

• Acumulación de cerumen. El cerumen actúa como una barrera protectora en el oído, pues impide que entren objetos extraños en el canal auditivo. Sin embargo, una producción excesiva de cerumen puede llevar a su acumulación y endurecimiento, provocando el bloqueo del canal.
• Bloqueo de la trompa de Eustaquio. Esta trompa ayuda a igualar la presión entre el oído medio y el ambiente externo. Cuando está bloqueada, puede causar la sensación de oído tapado.
• Infecciones y alergias. Resfriados, infecciones de los senos nasales y alergias a veces provocan inflamación de las mucosas y afectan la función de la trompa de Eustaquio. Esto genera obstrucción.
• Alturas elevadas. Los cambios bruscos de altitud suelen causar una sensación de oídos tapados debido a la diferencia de presión.
• Neuromas acústicos. Estos son crecimientos benignos en el oído que en algunos casos provocan obstrucción del oído y otras molestias auditivas.

Síntomas asociados

Además de la pérdida parcial de la audición, hay otros síntomas que revelan la presencia de obstrucción en los oídos. Las señales más frecuentes son las siguientes:

• Sensación de presión o plenitud. Es habitual sentir como si uno o ambos oídos estuvieran bloqueados o llenos.
• Dolor de oído. En ciertos casos, la obstrucción va acompañada de molestias o dolor, especialmente si hay infecciones o cerumen acumulado.
• Problemas de equilibrio. Los oídos juegan un papel clave en el equilibrio. Por lo tanto, una obstrucción podría generar inestabilidad o mareos.

Cuando alguien experimenta una obstrucción en el oído debido a una alergia o infección, es común que también se presenten otros síntomas como los siguientes:

• Secreción nasal.
• Tos.
• Dolor de garganta.
• Fiebre (en caso de infecciones).

Estrategias para aliviar los oídos tapados

¿Cómo abordar las molestias causadas por la obstrucción del oído? Las siguientes son las medidas básicas.

Limpieza adecuada del oído

Si la causa es el exceso de cerumen, lo más recomendable es realizar una limpieza suave, preferiblemente bajo supervisión médica, para evitar dañar el canal auditivo.

Uso de descongestionantes

Cuando la congestión nasal es la causa, los descongestionantes pueden aliviar la presión en los oídos.

Masticar o bostezar

Estas acciones pueden ayudar a equilibrar la presión en los oídos, especialmente en situaciones como vuelos o ascensos a lugares elevados.

Aplicar calor

Para las infecciones del oído, las compresas calientes en la zona afectada ayudan a reducir la inflamación y aliviar las molestias.

Maniobra de Valsalva

Este método consiste en exhalar suavemente mientras se mantiene la boca cerrada y la nariz tapada. Esto ayuda a equilibrar la presión interna del oído.

Prevenir la entrada de agua

Durante actividades acuáticas, es aconsejable usar tapones especiales para los oídos, con el objetivo de prevenir la acumulación de agua y posibles infecciones.

Si los síntomas persisten, se acompañan de dolor, pérdida de audición considerable o zumbidos, lo más recomendable es acudir a un especialista en salud auditiva. Un diagnóstico profesional garantiza un tratamiento adecuado; la causa subyacente determina cuál es la solución más efectiva.

Lecturas recomendadas

El oído musical

Manual del cuidado del oído y la audición