Sonidos del espacio captados por la NASA
Los humanos tenemos una gran cantidad de oídos para captar sonidos del espacio. Actualmente, gran parte de los telescopios que se fabrican son realmente radiotelescopios que escuchan señales que llegan a nuestro mundo viajando millones de kilómetros a través del universo.
Pero, si el sonido no se escucha en el vacío espacial, ¿cómo es posible captar cualquier ruido o señal de radio? Entonces, ¿qué ha podido captar la NASA a tal efecto? Vamos a verlo.
Porque sí, es cierto que el sonido no se puede escuchar en el espacio, ya que no hay una atmósfera que permita que las ondas sonoras sean transportadas. Sin embargo, las ondas de radio sí que se mueven y se desplazan por el vacío espacial, por lo que los aparatos como radiotelescopios y sondas capaces de captar dichas ondas sí que pueden capturarlas para que luego sean ‘traducidas’ en la Tierra.
En este sentido, encontramos el Instituto SETI, que lleva décadas encargado de captar todo cuanto el vasto universo tiene que decirnos, incluso ciertas señales que años atrás se interpretaron como que podían ser mensajes extraterrestres, aunque todo quedó en una falsa alarma.
Los sonidos del espacio que han captado las sondas de la NASA
Sin embargo, la NASA, siempre atenta a todo, sí que ha guardado todo cuanto ha llegado a sus archivos, que es mucho. Pensemos que tras varias décadas enviando sondas a los diversos planetas del Sistema Solar, como Saturno, Júpiter e incluso Plutón, el pequeño enano, muchas de ellas, casi todas, tenían la capacidad de captar ondas sonoras debido al instrumental que portaban.
Así pues, las sondas de la NASA han podido captar emisiones de radio de planetas como Saturno y Júpiter, los dos gigantes y monstruosos planetas gaseosos que dan la bienvenida a cualquiera que se adentre en la zona exterior de este sistema, y muchos de ellos son realmente escalofriantes.
Pero, sin duda, si hay un sonido del espacio que da verdadero escalofrío, ese es el que captó y envió la sonda Juno cuando se adentraba en el campo magnético de Júpiter camino de su muerte final tras una exitosa misión.
El potentísimo campo magnético de este planeta y su espesa atmósfera acaban con todo lo que se fabrica en la Tierra. Por eso, las grabaciones de la sonda durante las dos horas que hizo tal trabajo el 24 de junio de 2016 dan verdadero pánico. Pero, si esto no te asusta, no te pierdas las olas de plasma que captó el instrumento EMFISIS. La realidad supera hasta a la propia imaginación del surrealista David Lynch…