A prisión un hombre de 55 años por vender todo tipo de drogas en Santanyí y tener un arma

El juez ha decretado prisión provisional para un hombre de 55 años y nacionalidad española, que fue detenido por agentes de la Guardia Civil por vender todo tipo de drogas en una vivienda del municipio de Santanyí, en Mallorca, y por tenencia ilícita de armas.

Según ha informado el Instituto Armado este martes en un comunicado, de esta forma se ha desarticulado un punto de venta de droga muy activo en la localidad. La Guardia Civil de la zona inició la investigación al tener conocimiento de que un número importante de drogodependientes frecuentaban el domicilio del ahora detenido.

En un momento dado, se produjo una pelea en el punto de venta, que originó una intervención policial. Los agentes entraron en el domicilio e intervinieron más de 13 kilos de marihuana seca en cogollos preparados para su venta, 24 gramos de cocaína dosificada en envoltorios, cuatro gramos de speed, cuatro pastillas de metadona y 1,6 gramos de éxtasis.

Según la información que maneja la Guardia Civil, todas las sustancias estupefacientes incautadas alcanzan un valor en el mercado ilícito de más de 86.000 euros.

Además, durante la entrada y registro que realizaron en el punto de venta, los agentes hallaron un total de 3.870 euros en efectivo, una báscula de precisión, elementos de corte y un arma de fuego tipo revólver.

Una vez concluidas las diligencias y dado cuenta al Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Manacor, la autoridad judicial decretó el ingreso en prisión de manera preventiva del detenido.

Detenidos tres patrones de pateras

Por otro lado, la Guardia Civil ha detenido a tres hombres como presuntos autores de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y favorecimiento de la inmigración ilegal.

Según ha explicado el Instituto Armado en un comunicado, el primero fue detenido el pasado 21 de octubre. Tras el aviso del avistamiento de una embarcación con migrantes, se activó el Servicio Aéreo de la Guardia Civil y la nave fue interceptada y remolcada por el Servicio Marítimo. Tras llegar a tierra, el patrón fue identificado por los agentes de la Guardia Civil y se procedió a su detención.

Días después, durante un servicio rutinario del Servicio Aéreo de la Guardia Civil de Murcia consistente en la vigilancia de la zona marítima del sur de Formentera, los agentes fueron alertados de la posible presencia de una embarcación transportando a migrantes ilegales. El helicóptero de la Guardia Civil pudo alcanzar la zona señalada, comprobando que había una nave con 14 personas a bordo.

Cuando el patrón se percató de la presencia del helicóptero, rápidamente dejó de gobernar la embarcación y fue relevado por otro pasajero que iba encapuchado.