ANPE y USO, críticos con la Ley balear de Educación: «Nace sin consenso, es la normativa de unos pocos»

ANPE ha censurado este lunes que la Ley de Educación de Baleares, que está en tramitación en el Parlament, «no resuelve los problemas existentes» en el ámbito educativo.

En un comunicado de prensa, el sindicato ha lamentado que la Ley no recoge «aspectos esenciales» como la financiación, el reconocimiento de la insularidad o mejoras sociolaborales para el profesorado.

Según ANPE, la normativa deja «la puerta abierta a «la perfilación de plazas» y a la «elección a dedo» del profesorado, y el nuevo Reglamento Orgánico de Centros (ROC) se ha hecho sin la opinión de los docentes, informa la agencia Europa Press.

El sindicato ha añadido que «los nuevos currículums introducidos por la Lomloe generarán un aumento extra de la burocracia a los equipos directivos y al profesorado». También ha considerado que la Ley «no resuelve» otras cuestiones «fundamentales» como «la promoción y titulación del alumnado con materias suspensas» y la «falta de medidas que ayuden a la conciliación laboral y familiar».

Por todo ello, el sindicato no se muestra favorable a la aprobación de este documento, que se debatirá y votará este martes en el pleno de la Cámara balear.

Uso: «Nace sin consenso» de la comunidad educativa

USO, por su parte, ha advertido que la futura Ley balear de Educación «no aborda los problemas reales del mundo educativo», así como «no adopta medidas adecuadas a la realidad actual».

Según ha lamentado el sindicato en nota de prensa, la futura Ley, al igual la LOMLOE, nace «sin el consenso» de la comunidad educativa, «sin el apoyo mayoritario» del considerado como parlamento educativo -Consell Escolar de Baleares-, ya sea por unos motivos o por otros pero con el «descontento» generalizado de los actores principales, excepto algunos.

«Es evidente que hacer una ley de educación en contra de la comunidad educativa y de todas las principales entidades de la sociedad civil no es propio de un gobierno que se hace llamar progresista», ha opinado USO, que ha censurado que la futura Ley «intenta empequeñecer al sector educativo concertado, pasando de puntillas sobre los problemas que existen en dicho sector, o mirando a otro lado directamente».

«Se trata de una norma que se olvida también de unos trabajadores de la administración pública como son los docentes de religión, que ni siquiera nombra, y por todos es conocido que no hay mejor desprecio que el no aprecio», ha apuntado, criticando que «la futura Ley de Educación de Baleares lejos de igualar, divide el espectro educativo en dos, por un lado, los centros públicos, y, por otro, los que están ahí hasta que se les permita, la concertada».

«En USO creemos en la libertad de elección de padres y madres, pero siempre que elijan ellos y no la administración, porque los hijos son de sus progenitores, muy a pesar de lo que opinase la mal querida exministra Celaá», ha enfatizado.

Asimismo, el sindicato ha denunciado que la nueva norma «ataca la raíz del sector concertado desde la etapa de infantil -de cero a tres años-, vaciándole de alumnado, y por las puntas -enseñanza postobligatoria-, cortando la progresión de un alumnado que quiere seguir en el sector en que ha desarrollado toda su vida académica».

«Lamentablemente, no es una norma de todos puesto que obvia la complementariedad de redes y se estigmatiza la atención a los alumnos con necesidades, como si en la enseñanza concertada no se atendiese a ese alumnado», ha reprochado, incidiendo en que la futura ley «lejos de buscar una verdadera solución para todos los problemas que a día de hoy afectan al sector educativo, se busca firmar una primera ley a toda prisa y con un falso debate que lejos de contentar enfada y enoja».

Por todo ello, USO ha afirmado que «esta no es su normativa, es la de unos pocos para unos pocos, que tendrán su foto, se darán besos, abrazos y brindarán» pero, ha sentenciado, «los problemas de la educación seguirán existiendo, mientras ellos no habrán hecho más que mirar hacia otro lado».