Alerta en Melilla: descubren un segundo perro con rabia proveniente de Marruecos
La Dirección General de Salud Pública ha instado a cualquier persona que haya sido mordida a reportarlo de inmediato


Melilla ha comunicado este sábado un segundo caso de rabia en un perro, detectado nuevamente en la frontera con Marruecos, encendiendo las alertas en la ciudad española del norte de África. La Dirección General de Salud Pública ha instado a cualquier persona que haya sido mordida o haya tenido contacto salival con el animal a reportarlo de inmediato, recordando que «la rabia, una vez que se desarrollan los primeros síntomas, es una enfermedad mortal para personas y animales susceptibles».
La Consejería de Políticas Sociales ha precisado que la Unidad de Sanidad Animal y Zoonosis ha diagnosticado este caso, confirmado por el Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III. El perro, un mestizo adulto joven de tamaño mediano, con pelaje corto blanco y negro, ha sido avistado el 8 de abril en la zona del dique sur de la playa de la hípica, cerca de la valla fronteriza con Marruecos.
Según ha detallado Salud Pública, el animal ha comenzado a mostrar síntomas el mismo día de su ingreso y ha fallecido al día siguiente, el 9 de abril. La muestra para su análisis ha sido enviada el 10 de abril al Centro Nacional de Microbiología, que ha confirmado el resultado positivo el 11 de abril de 2025.
Las autoridades han urgido a quienes hayan tenido contacto con el perro a presentarse en las dependencias de la Carretera Alfonso XIII, nº 52 – 54, o a contactar con la Policía Local para iniciar el tratamiento necesario. También han solicitado informar si el animal pudo haber mordido a otros animales en la zona, destacando la necesidad de actuar con rapidez para contener cualquier riesgo.
Medidas y prevención
Salud Pública ha reiterado que «la rabia, una vez que se desarrollan los primeros síntomas, es una enfermedad mortal para personas y animales susceptibles», subrayando la gravedad de la situación. Han recomendado evitar el contacto con animales vagabundos o enfermos, no tocarlos ni alimentarlos, y han insistido en la importancia de la vacunación antirrábica, que es «obligatoria y gratuita» para perros, gatos y hurones mayores de tres meses en Melilla.
Este segundo caso en la frontera, tras otro detectado previamente en circunstancias similares, ha puesto en alerta a las autoridades, que han enfatizado la prevención como clave para evitar la propagación de esta enfermedad letal. La ciudadanía ha sido llamada a colaborar para proteger la salud pública en la ciudad.