La adicción que por fin ha dejado Paula Echevarría: de qué se trata y cómo lo ha hecho
La actriz llevaba más de diez años luchando por dejar algo que no le hacía bien, pero al fin lo ha logrado con una ayuda externa. Te contamos de qué se trata.
Paula Echevarría ha tenido una adicción durante años, pero ha conseguido librarse de ella recientemente. Hablamos de la adicción al tabaco.
Desde que la actriz se hizo conocida y empezó a copar las portadas del corazón, era habitual verla con un cigarro en la mano o fumando. Hay fotos de ella de 2008 en las que ya se veía que había caído en las redes del tabaco. De ese mismo año es la siguiente fotografía, en la que aparece con un cigarro y con su ex, David Bustamante.
Tuvo que pasar más de una década para que Paula consiguiese abandonar el tabaco para siempre. La intérprete lo intentó en numerosas ocasiones, y todas con éxito nulo. No obstante, a finales de 2018 echó mano de una ayuda externa y lo consiguió. ¿Qué hizo?
Cómo Paula Echevarría dejó de fumar tabaco
La también ‘influencer’ y pareja del exfutbolista Miguel Torres consiguió dejar la adicción que llevaba a cuestas ya once años gracias a los vapeadores.
En septiembre del pasado año, Paula Echevarría confirmó que al fin había dejado de fumar. Estaba pletórica, espléndida y orgullosa de sí misma. No dijo cómo lo había logrado, aunque más tarde supimos que su secreto radicaba en un cigarrillo electrónico.
La actriz fue pillada ‘vapeando’ en la calle. La foto (haz clic aquí para verla) se publicó en la revista Rumore, donde se cuenta que el truco que Paula había usado para dejar el tabaco había sido un vapeador.
¿Los ‘vapeadores’ ayudan a dejar de fumar?
Paula Echevarría no es la única que ha dejado el tabaco con la ayuda de los cigarrillos electrónicos, pues a día de hoy ya son miles de millones. En España, los estanqueros confiesan que la mayoría de los clientes que consumen productos de vapeo lo hacen para dejar el tabaco o fumar menos, y que un 48% logra su objetivo.
Al respecto, en Reino Unido el número de fumadores (14,4%) ha caído a los niveles más bajos de toda la Unión Europea (26%). Esta bajada responde a una sustitución del tabaco por el ‘vapeo’, transición que ha contado con todo el apoyo de las autoridades sanitarias inglesas.
De hecho, el departamento de Salud Pública Inglés publicó un informe que detallaba que al menos unas 20.000 personas al año en Reino Unido logran dejar de fumar gracias a los cigarrillos electrónicos. Este éxito ha llevado a numerosas sociedades médicas a solicitar que los vapeadores sean considerados medicamentos.
¿Pero los cigarrillos electrónicos son sanos o no?
Esta es la pregunta del millón. Los vapeadores ayudan a dejar de fumar pero… ¿son sanos? La ciencia ha concluido que sí, siempre y cuando se usen debidamente. En Estados Unidos, por ejemplo, los usuarios de cigarrillos electrónicos están teniendo muchos problemas por inhalar marihuana en estos aparatos, algo que no está regulado, que se hace al margen de la ley y que no está apoyado por los fabricantes de los mismos.
Si se usa de modo normal, esto es, con los líquidos que se venden legalmente en el mercado, se puede concluir que los vapeadores son sanos. Al menos eso es lo que han dilucido el Ministerio de Sanidad británico y el Real Colegio de Médicos del Reino Unido tras estudiar los cigarrillos electrónicos durante más de diez años. Estos organismos han determinado que vapear es un 95% menos perjudicial que fumar. Es decir, que el posible daño que pueden hacer los cigarrillos eléctricos sería, como mucho, el 5% del que hace el tabaco con sus centenares de sustancias cancerígenas.
Como vemos, Paula Echevarría dejó de fumar con los vapeadores, algo que hacen millones de personas en todo el mundo, como la también famosa Anita Matamoros, hija de Makoke y Kiko.