La espada deja sin trofeos a Ferrera, Román y Serrano en la última de San Isidro que presidió Ayuso
Los toros de Victorino Martín cerraron la Feria de San Isidro en la tradicional Corrida de la Prensa para Antonio Ferrera, Sergio Serrano y Román. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ejerció como presidenta de honor acompañada en la barrera por el Niño de la Capea; el presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid, Juan Caño; y la consejera de Cultura, Marta Rivera de la Cruz.
La tarde la abrió Antonio Ferrera que recibió al primero por lances para medirlo. Muy bien en banderillas. La faena la comenzó por la derecha tanteando al animal hasta que consiguió sacarle una tanda ligada. El astado apenas se desplazaba por el pitón derecho. Por el lado izquierdo resultaba muy complicado. El viento, una vez más esta semana, dificultaba la faena. Fue imposible continuar, por lo que no le quedaron más opciones que abreviar. Tuvo complicaciones con la espada. Silencio.
Sergio Serrano se fue a la puerta de chiqueros a recibir al Segundo a portagayola. El toro salió arrollando por delante, pero airoso con suerte. Tras reponerse de la entrada, continuó en los medios por medias verónicas. En el caballo fue complicado y en banderillas perdió pie Fernando Casanova en el tercer par e incluso le arrancó la taleguilla el duro astado.
Serrano comenzó la faena por la diestra al que sacó una buena tanda con la rodilla semiflexionada. Luego, otra serie excepcional con cambios de mano que consiguieron animar al público. Venía a por todas y se notaba. Continuó por el mismo lado, luciendo una tanda más muy ligada. El público se puso en pie con entusiasmo. Aguantó dos series más al natural, con el toro abriéndose en cada muletazo, que aprovechó Sergio Serrano para acompasarlo con su muleta las embestidas del toro. Cerró por lo bajo de una forma exquisita. Emborronó la faena con la espada. Recibió una fuerte ovación.
El tercero de Román se dejó saludar por medias. Brindó la faena a la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Comenzó la primera serie por la mano derecha. Las series apenas estaban ligadas, sobre todo porque le daba al toro excesivo espacio. El astado tomaba bien los engaños que aprovechó el torero para echarle bien los vuelos, pero la faena no tuvo la suficiente intensidad debido a la falta de su continuidad. Pinchó con la espada. Silencio.
Ferrera tomó partido con el segundo de su lote, pero apenas se dejó saludar con el capote. Tras el caballo comenzó la faena por la derecha. Continuó sacando una serie de naturales con cambios por la espalda. Ferrera puso muchísimo esfuerzo sacando pases que gustaron. Posiblemente, alargó demasiado la faena sin conseguir ligar los últimos muletazos. Remató con una gran estocada. Fue ovacionado.
Sergio Serrano volvió a recibir a portagayola al quinto de la tarde, esta vez de manera exitosa. Se ganó el olé de los tendidos con un buen ramillete de verónicas. Tras el caballo y banderillas, emotivo fue el brindis al tendido.
Comenzó la faena con la mano izquierda, pero el toro se frenaba. Serrano decidió cambiar de mano, pero le perdía el paso, aunque respondía mejor. Lució una serie que gustó a los tendidos. Intentó repetir, aunque el toro no terminaba de romper. Finalizó con media estocada y fue silenciado.
Román cerró la Feria de San Isidro de este año ante un sexto que no se dejó torear con el capote. Brindó al público. El valenciano llevó al animal a los medios para comenzar por la zurda. El astado muy deslucido apenas le dio opciones. Se esforzó, aunque se veía claramente inviable. Terminó con media estocada y descabellos. Fue silenciado.
Ficha del festejo:
Plaza de toros de Las Ventas. Última de San Isidro. Más de cuartos de entrada. Toros de Victorino Martin.
Antonio Ferrera (blanco y oro): pinchazo y estocada corta delantera (silencio); estocada baja (palmas tras aviso).
Sergio Serrano (burdeos y oro): tres pinchazos, estocada desprendida y cuatro descabellos (gran ovación tras aviso); pinchazo y bajonazo (silencio).
Román (verde hoja y oro): tres pinchazos y tres descabellos (silencio tras aviso); estocada trasera y atravesada, y dos descabellos (silencio).
En cuadrillas, José Chacón y Fernando Sánchez saludaron tras banderillear al primero. Sánchez volvió a desmonterarse tras dos soberbios pares al cuarto, en el que Chacón destacó también en algunos momentos de la brega.
La plaza rozó el lleno (19.648 espectadores según la empresa).