La Policía resuelve el crimen del pastor evangélico asesinado por mediar en un divorcio entre clanes

La Policía resuelve el crimen del pastor evangélico asesinado en Madrid por mediar en un divorcio entre clanes. Tras diez meses de investigación, los especialistas de homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid han detenido a seis personas del clan de «los Vargas» por la emboscada en la que murió de siete disparos la víctima, el día 16 de marzo de 2022.

Joaquín Jiménez, de 46 años, casado y con dos hijas, murió  acribillado a tiros por mediar en una separación matrimonial entre los clanes  de «los Vargas» y «los Limpias». La familia de la mujer había pedido ayuda a Joaquín por su condición de patriarca para mediar en una cita con la familia del marido, miembro del clan de «los Vargas».

La situación de Joaquín era complicada. Ella quería separarse de su marido y le acusaba de malos tratos. Él no aceptaba la separación. Además, el padre de la mujer, amigo de Joaquín,  pedía a la familia del marido que le devolviera 11.000 euros de la dote que ella había puesto en el enlace matrimonial. La reunión no empezó bien y terminó peor. El marido de la chica rechazó la mediación desencadenando una violenta pelea. Dos días más tarde, Joaquín fue víctima de una emboscada mortal junto al centro comercial Las Rosas del distrito madrileño de San Blas.

Ese día, 16 de marzo, poco antes de las 15:00 horas, cuando Joaquín circulaba en su Citröen Xsara a la altura de la estación de metro de Alsacia cuando un Audi Q7  embistió su coche. El impacto fue tan brutal que la parte delantera del coche de la víctima quedó aplastada por completo.

Joaquín no tuvo la oportunidad de salir de su vehículo accidentado. Rápidamente, un BMW todoterreno se situó al lado del vehículo de la víctima y vació el cargador sobre el pastor evangélico. La víctima recibió siete impactos de bala, varios en la cabeza, mientras otras dos balas se estrellaban contra los cristales de la estación de metro próxima. Los agresores huyeron, a la vez que llegaban al lugar un sanitario del SAMUR fuera de servicio y una patrulla de Policía Municipal que atendía a un motorista accidentado a unos metros de distancia. Sus esfuerzos fueron en vano, Joaquín murió allí mismo.

Esa madrugada uno de los ocupantes del Audi Q7 se entregó a la guardia civil en Sevilla. La Policía Nacional detuvo siete días después, el 31 de mayo, al conductor del Audi y padre del primer arrestado. Su mujer, tercer ocupante del Audi que participó en la emboscada, fue detenida en Mallorca el 15 de noviembre de 2022.

Los dos ocupantes del BMW del que partieron los disparos fueron detenidos en mayo y septiembre. El primero, Antonio de 44 años y con multitud de antecedentes, fue detenido en el puerto de Valencia acusado de ser el autor material de los disparos. Su hijo, también detenido en La Coruña, está acusado de conducir el BMW y por tanto de coautor en el crimen. Había un tercer vehículo que ejercía tareas de vigilancia durante la emboscada y conducía otro de los hijos de Antonio. El joven, de 19 años, fue el último detenido el pasado mes de noviembre. Los seis detenidos ya han pasado a disposición judicial y se encuentran en prisión provisional a la espera de juicio.