Una decena de helicópteros luchan contra el fuego en Las Arribes del Duero
Cerca de una decena de medios aéreos siguen trabajando en la localidad salmantina de Aldeadávila de la Ribera, en el parque natural de Las Arribes del Duero, en Salamanca, para controlar el fuego que se declaró el lunes y que, tras avivarse en el día de ayer, ha calcinado ya unas 400 hectáreas.
Entre esos efectivos que luchan contra el incendio figuran un avión anfibio de la base aérea de Matacán y helicópteros de los municipios salmantinos de Guadramiro, El Maíllo y El Bodón, a los que hay que sumar otros tres provenientes las localidades extremeñas de Plasencia y Pinofranqueado.
Otro helicóptero de coordinación, dos técnicos y cuatro agentes medioambientes continúan además combatiendo las llamas en las cercanías de Aldeadávila junto a nueve cuadrillas, un par de retenes y ocho camiones autobombas.
La evolución del fuego ha mejorado y, aunque el lunes afectó a un camping y a unas naves agrícolas, la Junta ha rebajado el nivel de alerta de dos a uno, en una escala creciente de cero a tres.
El fuego volvió a reavivarse
A última hora de esta mañana, el regidor del municipio, Santiago Hernández, ha confirmado que las llamas han calcinado cerca de 400 hectáreas, debido a que se avivaron ayer tarde y, aunque el fuego sigue activo, «ya no es tan fuerte como el lunes».
«El fuego se reavivó con virulencia la tarde del martes pero en una zona alejada ya del municipio. No ha habido que evacuar a ningún vecino y creemos que está controlado, pero queda trabajo por hacer», ha explicado el regidor.
Gran número de vecinos del pueblo sigue manos a la obra y combatiendo con mangueras y cubos un fuego que daban por acabado el lunes, «pero que las altas temperaturas y el fuerte viento hicieron que volviera a nacer en el último momento de la tarde de ayer», ha apuntado a EFE un residente en Aldeadávila.