La curiosa historia del último Boeing 747 de lujo, que será desguazado tras realizar sólo 16 vuelos

En el aeropuerto de Basilea-Mulhouse-Friburgo, situado en la frontera entre Francia, Suiza y Alemania, durmió durante una década un Boeing 747 preconfigurado para tener un lujoso interior como avión VIP privado. El avión es un ejemplar del modelo más avanzado del Jumbo 747 jamás fabricado: la variante 747-8, que voló por primera vez en 2010; pero, por su alto coste de operación, no tuvo éxito para uso comercial, por lo que fue rechazado por las compañías de vuelo.

¿Cuál es el motivo por el que va a ser desguazado pese a tratarse de una nave legendaria de la que Boeing ha entregado su último ejemplar al operador de carga Atlas Air a principios de 2023? Una aeronave que marcó el final de la historia de producción del 747; aunque Boeing aún guarda dos ases en la manga: dos 747-8 se están transformando actualmente y serán los próximos aviones del Air Force One del presidente de EEUU. 

Pero éste que nos ocupa, se encargó a la firma norteamericana en el año 2008 por la familia real saudí para ser al avión del príncipe heredero, Sultán Bin Abdulaziz. Desgraciadamente, el hijo número 18 del rey Abdulaziz bin Saúd murió de cáncer en 2011. Por ese motivo, el gobierno del país saudí decidió que el avión ya no era requerido. Pero Boeing lo fabricó de todas forma con el número de serie 40065. Confiaba en que algún otro cliente de gran poder adquisitivo decidiera quedarse con él. Ése es el motivo por el que el avión luce blanco por completo en el exterior y sin amueblar ni decoración en el interior. La matrícula que se le asignó fue N458BJ.

Fue entonces cuando Boeing llevó la aeronave al aeropuerto de Basilea-Mulhouse-Friburgo unos meses después terminarlo, hacia finales del 2012, para buscar potenciales clientes, pero no consiguieron colocarlo. Es por eso que estuvo una década en Suiza. Pero, a pesar de bajarle el precio y ponerle uno de promoción de 95 millones de dólares, nadie se interesó por él. Llegó la pandemia, la crisis económica y ahí terminó la quimera del N458BJ.

El Boeing 747, que ahora es denominado Jumbo fantasma, fue trasladado hacia el Pinal Airpark de Arizona, uno de los cementerios de aviones más grandes del mundo donde se desmantelan para reutilizar sus partes o donde se almacenan indefinidamente los aviones retirados.

Según cuenta la CNN, «ya han empezado a desmontar las primeras piezas del avión, por lo que está claro que ya no volverá a volar a pesar de su casi nulo uso». Ya le han quitado las partes externas más valiosas, como el timón, los elevadores, los flaps, el cono de cola, partes del fuselaje y los motores. «Muy posiblemente los instrumentos de cabina ya hayan sido también desinstalados, pues tienen un gran valor», añade la CNN.

Así se cierra el último capítulo del Boeing 747 más avanzado de todos los tiempos. Paralelamente, en diciembre de 2022, salió de la fábrica el último Jumbo 747. La ansiada entrega de la unidad final de la mítica aeronave lleva el livery de Atlas Air, una aerolínea de carga que hoy presume ser el principal operador de compañía. El Boeing 747 es uno de los más emblemáticos y queridos aviones de la historia porque transformó los vuelos de pasajeros al ponerlos al alcance de la mayoría con una drástica reducción de costos por pasajero.