Crystal Hefner, exesposa del fundador de ‘Playboy’, lo revela todo sobre la mansión
Ha declarado: "Este lugar no se limpia bien y hay moho"
Las cabañuelas de Jorge Rey no se equivocan: "los últimos días del año se espera..."
Aviso urgente de la AEMET: lo que nos espera esta Navidad en España
Crystal Hefner es uno de los rostros más destacados de la crónica social americana porque en 2012 contrajo matrimonio con Hugh Hefner, conocido mundialmente por haber fundado la revista ‘Playboy’. En las últimas horas ha adoptado un papel protagonista después de las últimas declaraciones que ha hecho sobre la mítica mansión. Lo ha contado todo y sus palabras han situado a Hugh en el centro de la polémica. ¿Qué pasaba dentro de esta casa tan famosa? Cada vez son más los que están dispuestos a destapar los secretos que nadie se atrevió a contar en el pasado.
La modelo y cantante Crystal Hefner tuvo oportunidad de pasar una temporada en la Mansión Playboy porque estaba casada con el dueño, pero con el paso del tiempo reconoció que nunca había llegado a enamorarse. Ahora ha sacado su libro de memorias y ha prometido que únicamente dará entrevistas positivas sobre el fundador de la famosa revista. La obra se llama ‘Solo digo cosas buenas: Sobrevivir a Playboy y encontrarme a mí misma’. Insiste en que atravesó una época complicada, pero no hace responsable a Hugh Hefner de nada de lo que sucedió.
Crystal insiste en que el magnate siempre le dio su sitio y en ningún momento vivió situaciones incómodas por su culpa, pero reconoce que entre ellos había muchas diferencias provocadas por las circunstancias sociales. «Me di cuenta de que me enfrentaba a un desequilibrio de poder realmente grande», explicó en la revista ‘People’. En un primer momento se dejó cautivar por un universo que antes de conocer a Hugh pensaba que era inalcanzable. «Parecía un mundo de éxito y fantasía, pero todo el mundo tiene que acostarse con una persona de 80 años. Hay un precio. Todo tiene un precio».
Las confesiones de Crystal Hefner sobre la mansión
Todo el mundo quiere saber cómo era la Mansión Playboy y qué pasaba en sus fiestas, pero ahora el mito corre peligro porque la exmujer del millonario ha decidido contar la verdad. «Este lugar no se limpia bien y hay moho y después de un tiempo se sentía degradado y asqueroso», confiesa sin ningún tipo de pudor. Hay una cosa que llama poderosamente la atención: Hugh tenía varios animales exóticos para sorprender a sus invitados y la modelo insiste en que estas mascotas no recibían un trato correcto.
«Sentía que estaba constantemente llorando por todo y por todos allí», responde cuando le preguntan por este tema. «Todos esos animales se veían tan deprimidos y tristes. Era todo una ilusión». Insiste en que a ella nunca le faltaron el respeto, aunque sí tuvo que hacer muchas cosas porque sabía que iban a complacer al dueño de la casa. Recuerda que Hugh le daba un dinero para que invirtiera en su aspecto físico y todo lo que se hacía debía contar con su aprobación: desde el color de las uñas hasta la ropa que llevaba.
«Nos daba una asignación semanal que esperaba que gastáramos en nuestro aspecto», desvela la autora de ‘Solo digo cosas buenas: Sobrevivir a Playboy y encontrarme a mí misma’. Ella no era la única que atravesaba esta situación. El resto de modelos que vivían en la casa seguían las mismas normas y tampoco podían tomar ciertas decisiones sin consultarle al dueño de ‘Playboy’. No obstante, Crystal admite: «por alguna razón pensaba que todo esto era normal y lo que significaba ser vista como hermosa en los ojos de Hef».
¿Cuándo y cómo llegó Crystal Hefner a la mansión?
Crystal Hefner conoció al magnate durante una fiesta de Halloween. Cuando recibió la invitación para acudir a la famosa mansión se sintió entusiasmada y promete que era un evento muy destacado en aquella época. Pensó que había tenido mucha suerte y aprovechó al máximo la oportunidad. Lo que nunca sabía era que se iba a terminar convirtiendo en «la favorita» del jefe. Este terminó pidiéndole matrimonio, pero nunca renunció a la compañía que le daban el resto de modelos. De alguna forma era una competición constante que Crystal acabó aceptando, a pesar de que le hacía sentir incómoda.
«Pensé, si solo me gusta todo lo que a él le gusta y hago todas las cosas que él quiere que haga, entonces soy la favorita. Y lo fui, pero me perdí a mí misma en el proceso», comenta con total sinceridad. Reconoce que pagó un precio muy alto para entrar dentro de los gustos del millonario, aunque cuando recibió su premio pensó que había conseguido exactamente lo que necesitaba. «En ese momento, pensé que estaba en la cima».
Ahora ha decidido contar su verdad, igual que hizo Holly Madison, otra de las modelos que vivió en la mansión durante un tiempo. El problema es que este relato es muy diferente. Ella entró cuando tenía 21 años y todavía era una mujer vulnerable. «Hacía sentir que no era lo bastante guapa, y yo miraba a todos los demás y me preguntaba constantemente qué tienen de diferente y por qué son mucho mejores», recordó en ‘People’ mientras aseguraba que nunca volvería a aquella casa.