Dr. Joaquín Llácer: «Los embarazos múltiples tras una reproducción asistida ya son cosa del pasado»

España es un país de referencia en el sector de la reproducción asistida a nivel internacional y líder en cuanto al número de tratamientos que se  llevan a cabo cada año. De hecho, en la actualidad casi un 10% de los nacimientos se deben a tratamientos de reproducción asistida. Esta cifra, la más alta hasta la fecha, enfrenta el estilo de vida actual, que ha potenciado el retraso de la maternidad, con las dificultades crecientes que viven las mujeres y parejas para concebir hijos de forma espontánea. Y es que se estima que en España 1 de cada 4 personas presentan problemas reproductivos hoy en día.

Ante esta compleja situación, las técnicas de reproducción asistida han facilitado que muchas personas puedan cumplir su deseo de formar una familia sin añadir riesgos derivados del propio tratamiento, después de haber recibido un diagnóstico desfavorable para lograr un embarazo espontáneo exitoso. Uno de los ejemplos más esclarecedores es, según argumenta el Dr. Joaquín Llácer, director médico de las clínicas Ginefiv, “la reducción exponencial de embarazos múltiples, hasta hace poco ligados a las técnicas de reproducción asistida como la fecundación in vitro (FIV)”.

Tal y como informaba la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Asistida (ESHRE) 3 en su 38ª reunión anual, celebrada en julio de 2022, la tasa de gemelos ha disminuido de forma constante en Europa durante los últimos diez años, situándose en torno al 10% según los registros recientes de los distintos países miembros.

“Este logro supone una enorme ventaja, ya que hoy en día podemos decir que los embarazos múltiples en el sector de la reproducción asistida ya son cosa del pasado y, por tanto, se reducen los riesgos tanto para el bebé como para la madre”, desarrolla el especialista. Los embarazos múltiples se asocian con mayor riesgo de prematuridad y bajo peso al nacer, por lo que se desaconsejan en las normativas y directrices de los centros especializados en fertilidad. Por el contrario, en la actualidad, en la mayoría de los casos se recomienda transferir solo un embrión para reducir al mínimo el riesgo de pasar por este tipo de embarazo.

El experto expone que la prematuridad “es la principal causante de los casos de morbilidad y mortalidad neonatal. Así, muchos de los niños que se encontraban hace unos años en las UCIs neonatales provenían de partos múltiples”. Por ejemplo, se calcula que el 15% de los nacimientos múltiples tienen lugar por debajo de las 34 semanas y esto implica que los pulmones no hayan madurado. Además, la posibilidad de que un niño tenga algún tipo de discapacidad es mayor en un prematuro. También hay que tener en cuenta los riesgos para la madre, recuerda el Dr. Llácer, ya que “la hipertensión arterial, la diabetes gestacional, la tasa de cesáreas o las hemorragias posparto son algunos de los problemas más frecuentes en los embarazos múltiples, con tasas que superan ampliamente las de los embarazos monocigóticos”.

En el caso concreto de España, los datos publicados por el Ministerio de Sanidad reflejan que la gemelaridad ha descendido un 11% respecto a 2019, pese a que el porcentaje de nacimientos mediante tratamientos de fecundación in vitro (FIV) e inseminación artificial ha aumentado un 1,3% respecto a esa fecha. “En España, a pesar de que la ley permite transferir un máximo de 3 embriones, la práctica habitual es introducir sólo un embrión por tratamiento. El perfeccionamiento de las técnicas de congelación es lo que ha permitido que consigamos mantener la eficacia aunque transmitamos un número menor”, aclara el especialista.

Alta especialización al servicio de la natalidad

Los expertos en fertilidad destacan que este cambio de tendencia está ligado a una mejora en la calidad de las técnicas y en los resultados. La posibilidad de transferir al útero de la gestante un solo embrión y de que el 80% de estas transferencias se efectúen en estado de blastocito y en diferido son algunos de los aspectos clave que han mejorado las tasas de éxito reproductivo. “Antes, la reproducción asistida estaba ligada a los embarazos múltiples porque la principal forma de optimizar el tratamiento era transferir al útero un número alto de embriones para ver si alguno implantaba”, explica el Dr. Llácer.

La relevancia que está ganando la innovación en ciertos campos de la salud humana “permite marcar la diferencia y que la asociación entre embarazo múltiple y un tratamiento de fertilidad, por ejemplo, ya pertenezca al pasado”, destaca el director médico de Ginefiv. Por este motivo, en la actualidad “el sector está centrado en mejorar la especialización y situarse a la vanguardia tecnológica, ya que nuestro objetivo es abordar con éxito el mayor número posible de casos de alta complejidad, que requieren equipos multidisciplinares centrados en las necesidades específicas de cada paciente”.