Presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE)

De Palacio: «La farmacia es secundaria para la Administración ante el problema de sanidad pública»

"…y puede que por eso se nos dedique tan poca atención. Aunque el impacto de nuestra actividad luego es muy importante en la sociedad"

"La falta de desarrollos de servicios profesionales en las farmacias en comparación con otros países donde igual se hacen seguimientos o revisiones de medicación, se vacuna, se criba, o hace actuaciones sanitarias sencillas"

Cada farmacia de Madrid tendrá más de 300 tests de antígenos gratis disponibles a partir del miércoles

De Palacio:

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El presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), Luis de Palacio, habla con OKSALUD tras su reelección por otro periodo de cuatro años y, además de hacer balance de esta primera etapa al frente de la patronal, avanza los proyectos y los objetivos.

De Palacio es licenciado en Farmacia y Derecho por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y máster en Bolsa y Mercados Financieros por el Instituto de Estudios Bursátiles. Además, es cotitular de una oficina de farmacia en Madrid. Asimismo, es presidente del Instituto Propatiens; miembro de la Comisión de Recursos del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid; patrón honorífico de FARMAS (Fundación Farmacéutica Aspime-Farmas).

PREGUNTA.- Enhorabuena. Ha sido usted reelegido por unanimidad, según acordó el pasado viernes, 3 de diciembre, la mesa electoral. ¿Por qué cree que de nuevo ha sido la suya la única candidatura presentada?

RESPUESTA.- Quizás porque se nos está valorando positivamente el anterior mandato como para no proponer alternativa. También hace falta mucho compromiso y dedicación a la Federación, donde los electores están viendo muchas veces que hay que venir llorado de casa y saberse ni agradecido ni pagado.

P.- En la candidatura figuran como secretario general Carlos Gallinal Sánchez; como tesorero Ángel Vives Cano; y como vicepresidentes 1ª y 2º María José García Gómez y Leopoldo González Sanz de Andino. ¿Por qué ellos? ¿Por qué los cambios?

R.- Leopoldo vuelve con el resto del equipo que repite. Él formó parte de la anterior Permanente y, por asuntos personales, tuvo que dejar sus responsabilidades en Madrid. Lo que se ha hecho es reducir la Permanente para ganar en agilidad y para facilitar la conformación de alternativas en periodos electorales. Los cinco nos conocemos bien, tenemos sintonía, y pertenecemos a asociaciones territoriales que son muy representativas, como Andalucía, Madrid, Galicia, Canarias y Valenciana.

P.- Recién nombrado presidente de FEFE en septiembre de 2017 hablaba usted de la derogación de recortes en la farmacia o la dispensación de más medicamentos… ¿Cómo se ha avanzado en este sentido?

R.- La posición patronal ha sido firme y reivindicativa para los recortes provisionales de 2000 y 2010, vigentes hoy. El Ministerio sigue sin escuchar. Sobre los medicamentos de acceso exclusivo en hospital, el problema tampoco se ha solucionado, aunque ha habido tímidos avances con motivo de la pandemia, cuando ni los centros de salud ni los hospitales se hacían cargo de esta necesidad por el colapso sanitario. Es cierto que para las administraciones, el sector de las farmacias es algo secundario a los problemas que tienen en la sanidad pública, y puede que por eso se nos dedique tan poca atención. Aunque el impacto de nuestra actividad luego es muy importante en la sociedad.

P.- Evalúe en general estos cuatro años.

R.- La primera parte, precovid, se consiguió una reunificación casi total de las asociaciones territoriales que hace mucho salieron de FEFE. Logramos generar un evento nacional atractivo para el sector, el ONE DAY, en el que pusimos en valor nuestra participación intensa en la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales), al realizarlo en la sala Jose María Cuevas. La segunda parte, de pandemia, ha supuesto la reorganización en torno a las videoconferencias, y las reivindicaciones por la infrautilización de las farmacias ha sido la tónica.

P.- ¿Cuál es la mayor amenaza que se cierne sobre la oficina de farmacia?

R.- Siempre se habla de la desregulación de las farmacias, o de la dispensación de medicamentos, por los intereses de otros agentes distintos. Pero la falta de desarrollos de servicios profesionales en las farmacias en comparación con otros países donde igual se hacen seguimientos o revisiones de medicación, se vacuna, se criba, o hace actuaciones sanitarias sencillas es, a mi juicio, otro gran reto que debemos afrontar.

P.- Este diciembre de 2021 con otros cuatro años pilotando FEFE se marca como objetivos el cobro de las guardias obligatorias; la farmacia asistencial y digital y la asistencia farmacéutica a domicilio. ¿Qué resultados esperamos sobre estas cuestiones en 2025?

R.- Seguro que vemos desarrollos en estos aspectos. El problema es que puede que sea de forma muy asimétrica debido al sistema autonómico que provoca tantas diferencias en la Sanidad en España. Habrá autonomías donde apenas veamos nada nuevo.

P.- Sobre la remuneración de las guardias obligatorias en las farmacias, ¿por qué ha llegado el momento si no se ha conseguido antes?

R.- Las guardias históricamente tenían mucho movimiento y se justificaba y cubría el coste personal y económico del farmacéutico. Con el tiempo, los servicios de salud han ido ofreciendo la medicación de urgencia también en sus servicios de guardia, que es mucho mejor para el paciente, pero que deja las guardias en las farmacias sin cubrir costes. Lo justo sería exonerar al farmacéutico de la obligación o que se le remunere si se le obliga. Pensemos que se abre en condiciones que en el mundo del derecho laboral están muy primadas en todos los demás ámbitos profesionales, y que puede tener repercusiones incluso sobre la salud.

P.- ¿Cuándo se perdió la farmacia asistencial y se empezó a centrar el tiro en el producto? ¿Qué implicaciones ha tenido este giro y cómo revertirlo?

R.- El medicamento siempre ha sido el epicentro del farmacéutico. Pero conforme se va devaluando en precio más y más, la farmacia tiene que multiplicar sus operaciones para igualar en términos corrientes su rendimiento. Si sólo se prima el volúmen de dispensaciones, se resiente la calidad (tiempo de dedicación profesional al usuario). Y limitar a la farmacia a trabajar producto exclusivamente, tiene como resultado que aumenta su carácter comercial. Revertir esta tendencia, sólo lo veo posible, con una mayor libertad de implantación de servicios sanitarios y farmacéuticos.

P.- ¿Cómo ha de adaptarse la oficina de farmacia para no morir ante la digitalización. ¿Por qué habla de «no pelear» con la tecnología, sería una amenaza para la venta del medicamento en la farmacia?

R.- Incorporando tecnología para perder burocracia de la farmacia en primer lugar. Hay muchos ámbitos de mejora tremenda, como automatizar los libros recetarios y de estupefacientes, y sus declaraciones a la administración; eliminar el recorte del cupón precinto y usar tecnología para esa labor de documentar la prestación financiada; lograr que el 99% de las recetas públicas y privadas sean electrónicas y tengan posibilidad de comunicar médico y farmacéutico… Conforme la sociedad interactúa digitalmente, también el farmacéutico tendrá que adaptarse. Tras la pandemia, la videoconsulta médica ha pegado un acelerón tremendo. Habrá servicios telemáticos sanitarios conviviendo con los presenciales y los farmacéuticos también deberíamos encontrar soluciones en ese sentido.

P.- Hablando de amenazas, haga un DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) muy breve para la oficina de farmacia en la actualidad.

R.- Debilidades: exceso de regulación, farmacias pequeñas y poco capitalizadas. Amenazas: una liberalización desordenada, un vaciado de actividad hacia los hospitales públicos y centros de atención primaria, el contacto directo de los laboratorios con los pacientes saltándose toda la cadena de valor y garantía de la distribución y dispensación farmacéutica.
Fortalezas: proximidad total a los usuarios, alta dispersión de las farmacias en el territorio, gran disponibilidad de farmacéuticos para la población, una distribución mayorista muy potente, un servicio muy bien valorado por la sociedad. Oportunidades: transformar las farmacias en verdaderos centros de servicios farmacéuticos, interactuar con los hospitales, los médicos y pacientes de forma digital, aprovechar las potencialidades de las recetas electrónicas.

P.- Haga un pronóstico de cómo van a cerrar este 2021 las farmacias españolas.

R.- Mejorando 2020, pero todavía lejos de los años 2007-2010.

P.- Pida un deseo para este 2022.

R.- Que se pase el Covid.

P.- ¿Qué valoración hace del esfuerzo que han hecho tanto las organizaciones como los farmacéuticos, a nivel personal, durante la pandemia?

R.- Los farmacéuticos han sido héroes, literalmente. Las organizaciones sólo hemos comunicado esta labor y hemos pedido que se nos escuche, con resultados dispares según territorios.

P.- ¿Qué ha cambiado en el sector durante la pandemia? ¿Se ha logrado una patronal más fuerte, más unida?

R.- Pienso que la falta de contacto físico nos ha perjudicado a todos como sociedad, pues hemos estado más aislados. Esto se ha notado también en la patronal. De todas formas FEFE goza de buena salud, y seguimos muy unidos.

P.- Adelante a los lectores de OKSALUD la próxima gran noticia del sector de la oficina de farmacia. ¡Necesito la exclusiva! (Risas)

R.- No sé… ¿La llegada de la píldora definitiva para adelgazar sin dietas? (Más risas)

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