Estas son las indicaciones del segundo fármaco financiado para dejar de fumar

Las farmacias españolas ya cuentan con el segundo medicamento existente en el mercado para ayudar a dejar de fumar en tan solo 25 días y que es financiado por Sanidad. Se trata de Recigarum y comercializado por la farmacéutica polaca Aflofarm. El coste que tendrá para los usuarios es de 71 euros en un envase de 100 comprimidos. Según las autoridades sanitarias, la recomendación es la toma de un comprimido cada dos horas hasta alcanzar una o dos al día.

En febrero de este año, se comenzó a comercializar otro de estos famosos medicamentos llamado Todacitan, que en su caso sustituía a famoso Champix (cuyo principio activo es la vareniclina) y a Zyntabac (bupropion). Los últimos lotes de ambos fueron retirados temporalmente el año pasado por detectar en ellos nitrosaminas, un compuesto cancerígeno.

En el caso de Recigarum, el principal activo es la citisiniclina, un vegetal extraído de los árboles y empleado durante la Segunda Guerra Mundial como sustituto precisamente del tabaco. Según las indicaciones de este medicamento, contribuye en el alivio de la ansiedad que se produce durante todo este proceso. Lo cierto es que, al menos, deben pasar más de cinco días para que este componente lleve al fumador a una reducción gradual de la dependencia de la nicotina.

Ayuda a dejar de fumar

Varios expertos han apuntado estos días a la necesidad de que las personas que inician estos tratamientos entiendan que este medicamento es una ayuda y que no todos consiguen lograr el éxito que se encuentra entre un 50 y 60%. Ciertamente, con un buen seguimiento médico y el fármaco, el paso es fundamental, porque lo que hace su principio activo es graduar la dependencia de la nicotina y evitar los estados de ansiedad que produce esta drástica decisión.

Responsable del 33% de los tumores

La Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM)  ha sido tajante a la hora de señalar que el tabaco es el principal factor de riesgo evitable responsable de un 33% de los tumores y de un 22% de las muertes por cáncer, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El consumo de tabaco constituye un problema de salud pública de primer orden. De acuerdo con los datos de la OMS, más de 1,1 billones de personas consumen tabaco y más de 8 millones de personas fallecen en el mundo por el tabaco cada año, tanto como consecuencia directa (más de 7 millones) como indirecta por exposición al humo ajeno en los no fumadores (1,2 millones). Además, como hemos visto tras dos años de pandemia COVID, los fumadores tienen mayor riesgo de desarrollar una forma severa de la enfermedad y, por tanto, un mayor riesgo de muerte.

En España, según datos de Instituto Nacional de Estadística (INE), casi un cuarto de la población española es fumadora habitual. Es especialmente preocupante la presencia de este hábito en jóvenes, ya que un 21,7% de la población de entre 15 y 24 años es fumador diario y hasta el 32% de la población de 25 a 34 años. En las últimas décadas, se ha producido un aumento del hábito tabáquico en mujeres y una reducción en varones, aunque sigue habiendo una mayor proporción de estos últimos (27,9% de los varones son fumadores habituales frente al 20,2% de las mujeres).