5 consejos para progresar en los entrenamientos con cargas
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Cada vez son más las personas que aprovechan esta época para apuntarse a los gimnasios. Buscan sobre todo buenos resultados y en poco tiempo. Sin embargo, en el deporte se necesita mucha constancia y dedicación para alcanzar las metas. Para progresar de manera adecuada hay que tomarse las cosas con calma y tener las ideas claras. También existe la posibilidad que después de un tiempo realizando ejercicios en el gimnasio no consigas mejorar y sientas un cierto estancamiento en tu rendimiento. Por eso hoy te proponemos 5 consejos para progresar en los entrenamientos con cargas.
Progresos en el tiempo
No se trata de progresar lo más rápido posible y luego estancarnos de nuevo. Es normal que todo el mundo desee alcanzar sus objetivos con celeridad, pero esto tampoco es conveniente. Lo más normal es que planifiquemos los entrenamientos siempre a largo plazo y que seamos constantes y pacientes con todo lo que se haga. No merece la pena estancarse, ya que siempre viene acompañado con una sensación de frustración que podría originar nuestra retirada del gimnasio. Siempre te vendrá bien tener en casa un banco multiestación de ejercicios.
Centrarnos en el punto débil
Es complicado que un deportista destaque por ser fuerte en todas las partes del cuerpo. Todo el mundo tiene puntos débiles y en ellos tenemos que centrarnos. Puede darse el caso de que destaquemos en press de banca, pero que nuestra asignatura pendiente sea el peso muerto. En ese caso deberíamos ejercitar con más intensidad y regularidad este aspecto para mejorar nuestro rendimiento.
Trabajar para mejorar la técnica
Cuando empezamos a entrenar en el gimnasio siempre cometemos el grave error de cargar lo máximo que se pueda, dando sensación de fortaleza. Sin embargo, sería mucho más adecuado centrarnos en la técnica, ya que por muchos años que llevemos entrenando, nunca controlamos del todo bien los movimientos. De poco sirve aumentar la carga si hacemos mal los ejercicios. Hay que ser más autocrítico con uno mismo y seguir mejorando cada día para perfeccionar la ejecución.
Tener referentes
A la hora de entrenar siempre viene bien tener una serie de referentes en el que nos reflejemos. Eso al margen de cuál sea nuestro objetivo,que puede ser mejorar la fuerza o simplemente entrenar por cuestión de estética. Tener una figura cerca que nos sirva de motivación es importante, pero al final si deseamos progresar en las sesiones sólo podemos compararnos contra nosotros mismos. Seguro que te encontrarás en la sala de musculación a gente con mucha fuerza, pero no busques parecerte a ellos. Lo más probable es que lleven años ejercitándose y además lo hagan a doble jornada en ocasiones.
Mantener un programa de entrenamientos
Con bastante frecuencia se suele cometer el error de variar los métodos de entrenamiento cuando estamos haciendo las cosas bien. Lo único que se consigue así es romper una adaptación que ya teníamos asimilada y el progreso lineal. En algunos casos se puede decir que es perjudicial para nuestro rendimiento variar cada tres semanas los planes de entrenamiento. Los cambios no siempre tiene los efectos que deseamos, así que mantendremos el programa previsto.