Tedios Maroto

El PSOE concurre nuevamente a la Alcaldía de Madrid derrotado antes de empezar. Cuesta comprender que Pedro Sánchez haya elegido una candidata tan poco competitiva (y del Barça) para torear en una plaza decisiva para todos como es Madrid, tras los malogrados Pepu Hernández, Jaime Lissavetzky, Miguel Sebastián, Antonio Miguel Carmona, Trinidad Jiménez y Fernando Morán…

«Es una hormiguita muy sensata y trabajadora». Según dicen sus defensores, Juanjo Moreno Navarro, catedrático y compañero en la Asamblea de Madrid, Aída Castellanos, politóloga y amiga, José Antonio Herce, profesor universitario y compañero en Fundación de Estudios de Economía Aplicada, e Isabel Oliver, Organización Mundial del Turismo y compañera en el Ministerio (todos más briosos y apetecibles que ella), en el video promocional que se ha lanzado de la Ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto AKA Who’s that girl.

De hecho, ella misma se presenta en el video con tan poco nervio y arrestos que cuando aparece en pantalla uno se siente impulsado a subir el volumen, con la intención absurda de verla mejor y, acto seguido, el contraste para darle color…

Lo que está fuera de toda controversia es que terminado el audiovisual uno experimenta la poderosa necesidad no de apoyar su programa político para la capital, sino de envolverla en una manta y darle un whisky, un secador de pelo y un abrazo, como si fuera una superviviente del Titanic, recién sacada de las aguas gélidas.

Reyes Maroto es natural de Ataquines, una población de 572 habitantes, un pequeño pueblecito de Valladolid, pero vive en Alcorcón; y eso me lleva a recordar que el PSOE puso el grito en el cielo cuando la alicantina Macarena Olona, se presentó por Andalucía en las autonómicas de la región.

Pero… Llevado por opacas razones (recibió calabazas del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, del ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, de la ministra de Defensa, de Margarita Robles, y de la ministra de Justicia, Pilar Llop…) o simplemente por incompetencia, nuestro presidente del Gobierno ha impuesto a la ministra, a pesar de contar con el perfil más bajo de todos los tiempos y no precisamente con el apoyo de las bases socialistas.

Lo que no es comprensible es que a estas alturas de la vida y del Arte de la asesoría de Imagen se envíe para sufrir un estrepitoso fracaso un candidato tan limitado emocionalmente. «Perseverante», dicen… Y, en definitiva, tan soporífero como Reyes Maroto, con todo respeto.

Y no es tontería, amigos. Ser aburrido en política (y en general) es mucho más profundo y más grave y abarca muchas más facetas que contar chistes sin demasiada propagación social, o vestir discretamente: «Trabajadora» (dicen…), 4 años de ministra y no se le conoce aportación ninguna, a excepción del día que dijo que lo del volcán en la isla de La Palma iba a ser un reclamo turístico: «Un extraordinario espectáculo». Ese día tuvo gracia, disculpen el humor negro.

Y no nos engañemos identificando sopor con algo distinto del tedio, como si los numerosos aburridos del globo terráqueo escondieran admirables dones que ofrecer al mundo sólo para compensar… ¡Mucho cuidado!

En cualquier caso, entre los ya confirmados por sus partidos y las quinielas, tampoco hay ninguna alhaja a la que excitados votar: en Más Madrid, se da por hecho que será Rita Maestre; Ciudadanos, con la vicealcaldesa Begoña Villacís. Por su parte, Vox,  Ortega Smith, Almeida por el PP y ya veremos.