Sube & Baja, por Jaime Peñafiel: semana del 1 al 8 de junio
SUBE: Florentino Pérez
El gran empresario madrileño, presidente del Real Madrid desde el año 2000 como sucesor de Santiago Bernabéu, por su discreto comportamiento durante la final de la Copa de Europa en Wembley, en la que también estuvo el Rey Juan Carlos aunque en ningún momento los comentaristas le nombraron. Pocos saben que lo de Florentino estaba predestinado desde niño. Esa cicatriz que tiene cerca de la comisura del labio fue el resultado de una caída al tropezar con un escalón del… ¡Bernabéu!, cuando subía corriendo a celebrar, con su padre, un gol del Madrid.
SUBE: Soraya Sáenz de Santamaría
Vicepresidenta que fue en el Gobierno de Mariano Rajoy que, el día 2 de junio de 2014 y una vez finalizada la triste ceremonia de abdicación del Rey Juan Carlos (sí, el Rey) a la que asistió en la Sala de Columnas del Palacio Real, observó con desagrado que el documento que acababa de rubricar con su firma allí se quedaba sobre la mesa sin que nadie, salvo ella, se molestara en retirarlo. Parecía que sólo importaba que firmara y se marchara.
SUBE: Miguel Ríos
El famoso cantante «hijo del rock and roll» y paisano mío cumple este 8 de junio ochenta años. Con tal motivo es homenajeado por cuatro bandas míticas de su Granada natal en un concierto benéfico. Los beneficios del evento irán destinados a la fundación que lleva su nombre. Ha vuelto a arrasar con el Himno a la alegría, cuya versión en inglés A song of joy fue un éxito mundial. A lo largo de estos años, su estilo ha variado desde el rock&roll más primigenio al progresivo o pop, pero siempre… ¡Miguel Ríos! Felicidades, paisano.
BAJA: Gerard Piqué
El que fuera defensa del Barcelona Club de Fútbol ha sido acusado por la juez Delia Rodríguez, titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda, de haber cobrado comisiones millonarias, un total de cuatro millones de euros anuales por el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí. Ello supone un delito de corrupción en los negocios y otro de administración desleal. ¡Vaya tipo!