Podemos convierte a los ucranianos que huyen de la invasión en refugiados de segunda
Delirante, surrealista, indecente: mientras millones de ucranianos intentan a estas horas abandonar el país de forma desesperada, Podemos -al que se le nota mucho su conexión ideológica con la Rusia de Putin- ha registrado un documento en el Congreso para exigir a su propio Gobierno un plan urgente para los refugiados. Pero no para quienes huyen de la invasión rusa, sino para los refugiados del «cambio climático».
El documento se acaba de registrar en el Congreso de los Diputados. Para ellos, lo perentorio en estos momentos es dar refugio a quienes sufren «las consecuencias directas del cambio climático, como la subida del nivel del mar y sus efectos destructivos sobre poblaciones costeras muy numerosas, el incremento de la magnitud de las tormentas, incendios, sequías y procesos de desertización o la falta de agua potable que reduce la capacidad para producir alimentos, pueden llegar a provocar un número variable y difícil de calcular de desplazados forzosos».
Parece evidente que para la formación morada los refugiados ucranianos pueden esperar, porque antes van quienes sufren los «efectos del cambio climático rápidos y fulminantes, como inundaciones, incendios u huracanes». Esos tienen prioridad sobre quienes huyen en estos momentos de las bombas lanzadas por Vladimir Putin. Lo de esta gente es insoportable. En el fondo, lo que subyace es su sectarismo ideológico. No en vano, todos los que en estos momentos se posicionan del lado de Moscú -Irán, Cuba o Venezuela- son amigos de Podemos. De ahí que la culpa de la invasión de Ucrania la tenga la OTAN. Vamos, que a su amigo Putin no le ha quedado otro remedio que entrar a sangre y fuego en Ucrania para defenderse del yugo de la Alianza Atlántica.
Y no parece conmoverse demasiado con el éxodo de millones de familias que huyen de la guerra, porque los refugiados que verdaderamente les conmueven son todos aquellos que a estas horas huyen de las tormentas y las sequías. Miserables.