¿A qué espera la Fiscalía?

El Irángate ha reventado por completo las costuras del traje demagógico que ha vestido a Podemos desde su origen. Al falso buenismo morado se le ha caído la máscara gracias a las investigaciones de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) que ha contado en exclusiva Okdiario. Las dictaduras de Irán y Venezuela han entregado 6,2 millones de euros a la cúpula de Podemos. Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, Tania Sánchez, Carolina Bescansa o Íñigo Errejón son fieles y acaudalados siervos del horror iraní y de la opresión venezolana. Ahora que la UDEF ha descubierto sus corruptelas, la cuestión que subyace es cuánto tardará en intervenir la Fiscalía y si será tan diligente como, por ejemplo, en los casos de Gürtel o Bárcenas.
La Fiscalía Anticorrupción comenzó a investigar la trama encabezada por Francisco Correa a finales de 2007. A principios de 2009, la Fiscalía ya había denunciado a los responsables de un caso que se saldó con 187 imputados, 74 de ellos políticos. En base a la información que les hemos contado durante la última semana, habría sobradas evidencias para imputarle a Podemos delitos fiscales tan graves como la financiación ilegal del partido y el blanqueo de capitales. Además de la gravedad cuantitativa de estos hechos, está el agravio cualitativo, ético y moral que supone recibir dinero y soporte de dos países que desprecian hasta el paroxismo la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Las irregularidades de Podemos no acaban ahí. En nuestro serial sobre el Irángate, hemos contado como Juan Carlos Monedero mintió sobre los 425.000 euros que recibió por hacer, teóricamente, un informe sobre la moneda única para los países bolivarianos. Según él, los había donado a La Tuerca pero al medio sólo llegaron 15.000 euros. Una falacia tan evidente como la dependencia podemita al respecto de Irán. Por pagar, la dictadura teocrática paga hasta el teléfono de Pablo Iglesias. No es casualidad que los caminos de Venezuela e Irán se crucen con tanta frecuencia en esta trama. Recordemos que HispanTV, la televisión que lanzó a Iglesias y compañía a la fama, es creación del sátrapa iraní Mahmud Ahmadineyad, que estuvo en Venezuela promocionando el canal poco antes de su estreno en enero de 2012. De hecho, Hugo Chávez llegó a saludar a toda la audiencia a través de un mensaje durante la inauguración.
La Fiscalía debe actuar, y pronto, ante todas estas evidencias que apestan a delito en sus variadas formas, matices y aristas. Lo más curioso de este caso es cómo se lo están tomando en el núcleo duro de Podemos. Desde su creación, han aplaudido hasta la saciedad todos los casos de corrupción que implicaron al PP. Ahora, sin embargo, cuando la UDEF pone cerco a sus miserias, hablan de «manipulación» y tachan como «gravísimo» que Interior haya pedido una investigación sobre todas sus cuentas. La Fiscalía no puede caer en la trampa del fatuo victimismo y debe hacer que la ley, y sólo la ley, esclarezca definitivamente todos los indicios de este Irángate que deja a la formación morada con los dos pies al borde del precipicio y su discurso político como mero papel mojado.