Soto del Real, ciudad de vacaciones
Ilustre señor: ¿Cansado de tediosos veraneos con la familia? ¿Le horroriza Benidorm y sus rebaños de chusma con sombrilla y nevera portátil? No se preocupe, a solo 43 kilómetros de Madrid está la solución: el Centro Madrid V, un lujoso complejo donde pasar una temporada con todas las comodidades. Inaugurada en 1995, esta villa de descanso para políticos, empresarios y banqueros es la solución ideal para escapar de la legalidad que nos tiraniza. Guarde a buen recaudo lo que ha robado y venga con nosotros. Los requisitos para ingresar le serán familiares: blanqueo de capitales, falsedad documental, cohecho, fraude, organización criminal… Tranquilo, los cumple de sobra.
La ubicación del centro es idílica, a los pies de la Sierra de Guadarrama y con el Embalse de Santillana a solo unos metros, nuestro resort hace las delicias de los millonarios que tienen la fortuna de pasar allí una temporada. Las habitaciones constan de diez excelentes metros cuadrados y son individuales, con ducha, baño propio y mesa de estudio. Por menos de 200 euros, usted puede tener tele en su habitación. No se preocupe si le agobia haber perdido de repente el chófer, la secretaria y la tarjeta black; un grupo de psicólogos, educadores y trabajadores sociales le ayudarán a que en pocos días esté como en casa. No olvide que las instalaciones cuentan con piscina, dos pistas de squash, gimnasios, pistas de baloncesto, fútbol-sala, balonmano, sala de juegos y hasta biblioteca, para los más perversos.
Los horarios de actividades son bastante flexibles, solo se le pedirá que se levante a las ocho y desayune acto seguido. Luego tiene toda la mañana libre, comerá a las 13.30 y acto seguido dos horitas y media de siesta, que tampoco hay prisa de ningún tipo. Aquí se viene a descansar. A partir de las 16.30, de nuevo el tiempo es suyo: puede acudir a nuestras sesiones de cine, pasear, apuntarse a un taller, dar una vuelta por la biblioteca o jugar al fútbol con sus nuevos compañeros hasta la hora de la cena. Lo único malo es no poder disfrutar de las maravillosas dehesas cubiertas de fresnos que rodean el recinto. Las dehesas, ya se sabe, son idóneas para llevar a los animales a pastar, pero ustedes son la élite, no pueden caer tan bajo. Ya habrá tiempo para volver a guiar al rebaño cuando amaine la tormenta. Sean pacientes.
Aquí van a estar muy bien. ¿No me creen? Pregúntenle a Díaz Ferrán, que lleva ya cinco años con nosotros. Por aquí han pasado Ruiz Mateos, Blesa, Francisco Granados, Pablo Crespo, Correa y El Bigotes. Estos tres últimos suspiran por abandonar Valdemoro —qué poco glamour hay allí— y volver con nosotros. Mario Conde no quiere otro centro para sus retiros de la vida pública. Pujol Ferrusola, Sandro Rosell y Ángel María Villar tienen unas charlas futbolísticas de lo más divertidas. Y no os digo nada cuando empiezan con los negocios, qué gente tan despierta, oiga. Es cierto que Ignacio González lo está pasando mal, pero es porque su hermano nos ha tenido que abandonar, y el pobre lo echa de menos. Además, esta semana son las fiestas del pueblo, y hay infinidad de actividades interesantes. El concejal de festejos, que no da puntada sin hilo, ha contratado para este año como actuación estrella al grupo musical La fuga. ¿Quién puede resistirse a semejante invitación?